Sábado 16 de Enero de 2010 Edicion impresa pag. 10 > Regionales
"Hay muchos que no pueden meter mano"
Respuesta del EPEN al reclamo de la obra social provincial

NEUQUÉN (AN).- El director obrero del Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN), Alfredo Marcote, señaló ayer que las nueva andanada de críticas que recibe la empresa provincial de parte del titular del Consejo de Administración del Instituto de Seguridad Social del Neuquén (ISSN) Marcelo Berenguer se relaciona con "una cuestión política" y con el hecho de que "en el Ente hay muchos que no pueden meter la mano".

Anteayer, Berenguer volvió a reclamar a la empresa encargada del suministro eléctrico en buena parte de la provincia el pago de una deuda en concepto de aportes patronales. La otra elección que hizo el titular del ISSN a la hora de los cuestionamientos fue la del municipio, otro de los deudores.

"El EPAS debe 10 veces más que nosotros. Al asesor legar del ISSN, que ahora trabaja con Berenguer, es empleado de planta del EPEN, nosotros lo denunciamos por mal desempeño. En el recorte que hace al elegirnos a nosotros para reclamar que le paguen, está ese antecedente, y la certidumbre que tienen muchos funcionarios de que acá no pueden venir a meter la mano, porque hacemos las cosas bien", disparó el director obrero por los trabajadores en representación de ATE.

"Hay muchos que están en contra del modelo de cogestión que rige en el EPEN", dijo Marcote, acerca de la representación de los trabajadores dentro del directorio. "La deuda nuestra es el 3% del total" de lo "que le deben todos a la obra social".

El titular del Instituto también dirigió sus críticas al municipio, integrado por Unión de los Neuquinos (Une), partido vinculado a los sindicatos estatales opositores al gobierno provincial.

El EPEN, por otra parte, forma parte de la avanzada de los sindicatos que integran la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), que tienen el objetivo de conseguir que en la Legislatura se modifique la ley 611: buscan que el directorio de la obra social tenga una mayoritaria representación sindical. En diciembre, la empresa hizo el primero de una serie de plebiscitos con ese fin: el 90% de los empleados votó por cambiar la ley.

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