En los últimos veinte años, el turismo se consolidó como una de las principales actividades económicas en todo el mundo, generadora de recursos superiores a muchos rubros de la producción de bienes. Independientemente de la crisis financiera internacional que afecta a todo el mundo desde fines del año 2008, la Organización Mundial de Turismo es optimista respecto de la actividad y su recuperación. El medio ambiente, la cultura y el ocio conforman las bases, contenido y tiempos del turismo, siendo los servicios los que posibilitan su acceso y realización.
La actual concepción del turismo integra cuatro variables que no siempre están directamente relacionadas pero que, sin embargo, forman parte de un nuevo producto:
? La incorporación sistemática a la oferta turística de las culturas locales, con sus características y valores.
? El uso racional de los recursos naturales y culturales en las actividades programadas.
? La estandarización de los servicios turísticos.
? La interacción del visitante con el entorno, lo que crea el concepto de "turismo de experiencias".
La compatibilización de los intereses de los negocios privados con la sustentabilidad de los destinos constituye el desafío que deben asumir los gobiernos (en cualquier estamento) en su carácter de orientadores, promotores y reguladores del turismo. En tal sentido, los mismos deberán proponer horizontes, definir límites y realizar arbitrajes. Además, les corresponde gestionar mecanismos que incentiven a inversores, operadores y turistas. De esta forma, se promueven las cualidades diferenciales de la producción, coordinando y estimulando las actividades turísticas, siempre en un marco de explotación racional y sustentable.
Fomentar una estrategia de crecimiento sustentable, basado en el desarrollo local y regional y sustentado en proyectos integrales con una utilización racional del patrimonio cultural y natural, permitirá un doble objetivo: por un lado, la preservación de culturas y entornos; por el otro, el desarrollo del sector terciario y la creación de empleo. El turismo es el sector de la actividad económica que genera mano de obra con la menor inversión.
El turismo es, sin duda, una actividad que puede incentivar y posibilitar la preservación del patrimonio, tanto cultural como natural. Siempre que existan marcos adecuados de regulación y control. Es preferible que sitios naturales y/o culturales sean puestos a disposición de turistas, con las correspondientes medidas de protección y monitoreo, a que los mismos sean usados por la gente sin ningún tipo de control.
Una de las facetas a promover del turismo cultural son las festividades autóctonas, que refuerzan la identidad de una sociedad, mantienen la memoria colectiva y preservan los usos, creencias y costumbres.
La planificación estratégica se constituye en una verdadera política de Estado cuando supera las contingencias gubernamentales, manteniéndose y sosteniéndose con la apoyatura de todos los actores sociales, culturales y económicos durante más de un período de gobierno constitucional.
Dicha planificación estratégica debe contar con el consenso de dirigentes públicos y privados, de los actores socioculturales y de los miembros de las comunidades que integran el producto turístico de un determinado destino, con el fin de compartir la visión de futuro, atenuar las incertidumbres y generar compromisos de participación activa.
La planificación estratégica turística se caracteriza por los siguientes elementos:
* El sujeto beneficiario de la planificación es el residente; el turista pasa a cumplir el rol de usuario y prescriptor del destino.
* Parte del reconocimiento de la totalidad situacional socioeconómica, cultural y política del Estado y de la comunidad vinculada.
* Es flexible, pues plantea la negociación y concertación con los sectores privados y las instituciones intermedias vinculadas con la actividad.
* Contempla la participación sistemática y permanente de la comunidad.
* Tiene a los municipios y gobiernos locales como unidades primarias de planificación y operación dentro del sistema turístico regional, provincial y nacional.
* Se adopta el concepto de marketing estratégico, que parte de la definición del producto recreativo turístico de la comunidad y se vincula con los mercados mediante módulos precisos de comunicación, promoción, publicidad, comercialización e inversiones.
El sector político de la comunidad, conformado por los organismos, funcionarios y autoridades de los gobiernos (locales, provinciales y nacionales), tiene funciones esenciales en la organización, gestión y supervisión de las actividades turísticas, procurando la protección, conservación y el uso racional de los recursos naturales y culturales comprometidos en prestaciones.
Previamente a cualquier intento de planificación turística, debe tenerse en cuenta la generación de actividades conectadas e integradas que prioricen delinear un proceso de desarrollo socioeconómico y cultural dentro de la comunidad. Es decir, y se debe establecer bien claro, que el intento de un aprovechamiento de la actividad turística significa aportar y trabajar para el desarrollo de las estructuras y personas que integren el sistema turístico, abarcando en esa planificación a toda la comunidad local y a sus principales referentes.
SERGIO RODRIGUEZ
(*) Ex secretario de Turismo de la provincia de Río Negro. Ex coordinador del Consejo Federal de Turismo de la República Argentina