El seleccionador argentino Diego Maradona se libera hoy de la sanción que le impuso la FIFA por los exabruptos que lanzó en octubre en Uruguay, por lo que el plantel albiceleste se lanza a partir de ahora a pleno a la fase preparatoria final para el Mundial de Sudáfrica 2010.

Los dos meses de sanción que le impuso la FIFA a Maradona por sus insultos tras la victoria ante Uruguay que le dio la agónica clasificación al Mundial a la Argentina se cumplen hoy 15 de enero.

El "Diez" cumplió a rajatabla la pena de no realizar ninguna actividad pública relacionada con el fútbol. Por ello no pudo asistir al sorteo del Mundial, ni visitar el lugar de la concentración argentina en Pretoria y debió mantener un muy bajo perfil en el partido amistoso jugado en diciembre contra Cataluña en Barcelona, siguiendo el juego desde la tribuna.

Además, se sumió en un silencio de dos meses, sin declaraciones públicas pese a que el cuerpo técnico argentino terminó el año 2009 con un fuerte conflicto entre el secretario de selecciones y manager, Carlos Bilardo, y el ayudante de campo y mano derecha de Maradona, Alejandro Mancuso, que hizo temer una crisis.

Liberado de la sanción, Maradona viajará el domingo a Pretoria para conocer el lugar donde se concentrará la selección argentina en Sudáfrica, en la Universidad de Pretoria.

En las próximas horas también se espera que dé a conocer la lista de jugadores convocados para el partido amistoso ante Costa Rica, programado para el próximo 26 de enero en la provincia argentina de San Juan. También se está negociando jugar otro encuentro el 10 de febrero contra Jamaica en el balneario argentino de Mar del Plata.

El principal desafío en la fase preparatoria será el amistoso ante Alemania previsto para el 3 de marzo en Múnich. Luego quedarían otros dos choques, el 25 de mayo -Día del Bicentenario argentino- ante Canadá y probablemente cuatro días después frente a Israel, un rival que ya es tradición en la previa a los Mundiales.

Maradona tendrá una intensa tarea en los próximos meses, en los que deberá dar forma y estilo a una selección integrada por grandes estrellas del fútbol internacional, pero que aún no logró hallar una identidad colectiva.

DPA.-