La supermodelo británica Naomi Campbell recibió durante una cena organizada por Nelson Mandela en 1997 un "diamante de sangre", regalo del dictador africano Charles Taylor, según aseguró la fiscalía en el proceso que se sigue contra el ex mandatario de Liberia en La Haya por crímenes de guerra.

Se desconoce si Campbell (de 39 años) será citada como testigo en este proceso, según indicó hoy un portavoz del tribunal al ser consultado al respecto. Tampoco se conoce si la actriz Mia Farrow, de la que al parecer procede la información, será citada como testigo.

La fiscalía está convencida de que el diamante proviene de una partida de Sierra Leona (que estaba en plena guerra civil) que Taylor intentó llevar en secreto a Sudáfrica para venderla allí. El acusado negó hoy las acusaciones al ser interrogado sobre el tema.

Un portavoz de Farrow dijo que la actriz se encuentra actualmente en África y no está localizable para pronunciarse sobre el tema. Campbell, por su parte, declaró que apoya el Tribunal especial para los crímenes de guerra en Sierra Leona, pero en la medida de lo posible no quiere pronunciarse públicamente sobre nada más.

La fiscalía acusa a Taylor, de 61 años, de haber impulsado como presidente de Liberia en la segunda mitad de los años 90 la guerra civil en la vecina Sierra Leona.

Se le pagó con diamantes robados por equipar y armar a los rebeldes. Esos "diamantes de sangre" fueron convertidos en dinero a través de mediadores delincuentes, según la fiscalía.

Taylor está acusado de crímenes de guerra y contra la humanidad en 11 casos, entre ellos una masacre contra civiles, violaciones masivas, reclutamientos forzosos de niños y saqueos. El imputado niega todas las acusaciones. El proceso comenzó en enero de 2008 y se calcula que la sentencia se pronunciará a fines de este año.

La fiscal Brenda Hollis relató ante la corte que tras la cena con el presidente sudafricano Mandela, Taylor envió a Campbell un "gran diamante" a la habitación de su hotel.

La defensa de Taylor esgrimió como defensa que no hay una declaración jurada al respecto de la modelo, sino que se trata de una "anécdota" difundida por Farrow.

Farrow y Campbell acudieron en septiembre de 1997, al igual que el músico estadounidense Quincy Jones a una invitación para la inauguración del nuevo tren de lujo sudafricano "Blue Train".

DPA