El sitio de internet de TyC Sports marca las horas segundo a segundo. En este instante faltan 150 días, cero horas, cero minutos y los segundos que pasan y nos acercan inevitablemente al Mundial de Sudáfrica. El tiempo pasa. Ya falta menos: 149 días, 23 horas y 58 minutos...
Mientras esto ocurre, Carlitos Tevez deja el césped del Manchester Stadium bañado en ovación, tras convertir tres de los cuatro goles con los que el City derrotó al Blackburn Rovers, por la fecha 21 de la Premier League.
El domingo, Lionel Messi y Gonzalo Higuaín hicieron lo suyo en sus equipos. La Pulga no fue menos que Carlitos y también hizo tres en el 5-0 del Barcelona sobre el mediocre Tenerife.
Y el Pipita fue el autor del primer gol (golazo) en el 2-0 del Real Madrid sobre el Mallorca. El ex River comenzó la temporada detrás de Karim Benzema y Raúl. Hoy ambos lo miran desde el banco de suplentes. La afición lo idolatra y el declaró que quiere jugar toda la vida vida vestido de blanco.
Los días que restan para la Copa del Mundo son los más importantes para las individualidades. Y las individualidades argentinas gozan de buena salud futbolística. No debiera haber dudas sobre quiénes atacarán en Sudáfrica.
El problema es que la Selección argentina no tiene resuelto lo colectivo. Por eso las individualidades caen en saco roto cuando se ponen la albiceleste.
Si el paso del tiempo juega favor de las individuales, en cambio le juega en contra al entrenador Diego Maradona. Ayer su supo que fue el peor técnico del año, según la Federación Internacional de Historia y Estadísticas de Fútbol, entidad no oficial aunque reconocida por la FIFA. También fue el peor año de la selección en muchos años.
Hay jugadores, falta el equipo. Por ahora. Y el tiempo sigue pasando.
JUAN MOCCIARO
