La jornada de descanso de ayer en el Rally Dakar no tuvo nada de tranquila. El día comenzó un recargo de tres horas al líder de los cuatriciclos, Marcos Patronelli, que fue seguida por una amenaza de abandono suya y de su hermano Alejandro y finalmente terminó con el levantamiento de la sanción. Conclusión: todo sigue igual y hoy continúa la carrera.

La Comisión Fiscalizadora le había impuesto a Marcos una sanción de tres horas por sacar su cuatriciclo del vivac para repararlo.

Conocida la medida, los hermanos Patronelli, que el viernes venían de hacer su tercer 1-2 de la carrera, anunciaron a primera hora de la tarde y en forma extraoficial, que dejaban la competencia que iban punteando hasta la etapa de ayer.

"No corremos nunca más en el Dakar, nos quieren sacar de la competencia y es una vergüenza. Como argentinos, no nos quieren, que al Dakar lo corran los franceses. No le presten más atención a esta carrera", señaló Marcos tras conocer la penalización.

"Los comisarios deportivos no me dieron ninguna explicación de nada. Dicen que sacamos el cuatriciclo a la una de la mañana en Iquique para arreglarlo y eso es una mentira grande como mi casa. Yo a las once estaba durmiendo", agregó Patronelli, en declaraciones realizadas al canal de cable TN.

Sin embargo, horas más tarde, en la única jornada de descanso de la exigente competencia que por estos días se encuentra en tierras chilenas, y tras reunirse con los encargados de la organización, ambos resolvieron continuar en la carrera que los tiene como principales exponentes de su categoría.

Sobre el final de la tarde, la organización anunció que dejaba sin efecto la sanción, por lo que todo continúa igual: Marcos cómodo líder y Alejandro segundo.

El propio puntero de la general, que sobre la última parte de la etapa anterior había perdido una rueda de su vehículo cuando transitaba a 130 km/h accidente al calificó como posible "sabotaje", luego pidió disculpas por sus declaraciones y dijo que todo se trató de "una confusión".