La dirigencia del radicalismo dejó trascender el malestar por las señales de autonomía que deslizó el vicepresidente Julio Cobos, en relación a su posible candidatura para 2011, y le advirtieron que el programa de gobierno surgirá por consenso desde el seno partidario.

A partir del domingo, cuando Cobos anunció a través de la prensa su deseo de enfrentar a Néstor Kirchner en una contienda presidencial dentro de dos años, los radicales buscaron poner límites a la actitud independiente que desde hace varios meses pretende mostrar el mendocino.

El presidente del bloque de senadores radicales, Gerardo Morales, fue uno de los primeros en realizar en público esta advertencia, que ya surgió a nivel interno en otras oportunidades. En ese sentido, Morales reconoció a que Cobos tiene "todo el derecho" de querer competir por la sucesión de Cristina Kirchner, pero al mismo tiempo insistió en que le genera "ruido" que "no forme parte del diseño de las propuestas y que no estén en el marco del Comité Nacional" que conduce el senador Ernesto Sanz. El secretario general del Comité Nacional, Jesús Rodríguez se manifestó en la misma sintonía.