El comisario Inspector Yves Vallejos, hasta hace poco responsable de la División Narcotráfico de la Policía de Río Negro, fue designado jefe de la flamante Regional Quinta de la fuerza que tiene su base en Cipolletti y abarca la misma jurisdicción que la de la IV Circunscripción Judicial, desde Catriel hasta Fernández Oro.
A las pocas horas de saberse esta novedad comenzaron las críticas, y nada más ni nada menos que de Roberto Uriarte, el papá de la jovencita Otoño Uriarte (16), quien desapareció en Fernández Oro una noche de octubre del 2006 y su cuerpo -sólo restos óseos y algo de ropa desilachada- fue hallado entramapado entre los hierros de una exclusa de la usina del paraje El Treinta.
Al momento de la desaparición y hasta abril del 2007 Vallejos se desempeñó como comisario de Oro y casi sin solución de continuidad recibió críticas de la familia de la chica, de grupos de jóvenes activistas y estudiantes compañeros de la occisa, de la agrupación Hijos, y de otros segmentos que incluso tenían su centro de operaciones en la parroquia orense.
Roberto Uriarte salió por LU19 con los tapones de punta. Ante la insistencia del periodista, Uriarte calificó de "vergonzosa" la designación de Vallejos pues, dijo, "se comprobó que no supo manejar el caso y dio muestras de incapacidad", considerando que la designación estaría guardando relación con una presunta línea de confianza entre Vallejos y el jefe de la policía rionegrina Víctor Cufré.
En un breve contacto telefónico con este diario el jefe policial, preguntado por las críticas, dijo que tiene "la conciencia tranquila", que trabajó a "destajo" en este caso incluso con la colaboración de policías Federal y provinciales, y que siempre lo hizo con directivas y conocimiento del juzgado intervieniente, el Penal a cargo de la doctora María del Carmen García García.
Preguntado por su cuestionada presencia en un allanamiento en un cabaret de San Martín de los Andes en el cointexto de la pesquisa señaló que todo estaba en conocimiento de la magistrada interviniente.
En Fernández Oro y unos días después de comprobarse, vía ADN, que los restos encontrados en la usina eran de Otoño, hubo pintadas en la comisaría y más tarde una masiva marcha en Cipolletti que terminó con destrozos importantes en el acceso al edificio tribunalicio de calle España y Urquiza y también con ataques con bombas molotov al comité Radical, en Avenida Alem.
Las presiones sobre el poder político y el propio comisario sellaron su suerte y el gobierno provincial lo removió de la comisaría de Oro en abril del 2007. Empero, continuó en actividad y con mayores responsabilidades porque estuvo en cargos altos de la Regional Segunda de Roca y, hasta su nombramiento en la flamante Regional Quinta, se mantenía en el rango más elevado de la División Narcotráfico.
Agencia Cipolletti