VIEDMA (AV).- Los acantilados de la costa norte del golfo San Matías siguen siendo una serio riesgo para bañistas y acampantes.
Por eso, la Dirección de Defensa Civil recordó el pedido de precaución a los veraneantes por las altas probabilidades de derrumbes en los acantilados del litoral marítimo.
Aunque están colocados los carteles que alertan sobre este riesgo, muchas personas hacen caso omiso de esta advertencia, poniendo en peligro su integridad física.
Los guardavidas que operan en algunos sectores, están instruidos para que den a conocer a los visitantes acerca del riesgo que implica estar debajo del acantilado.
Sin embargo, según datos aportados por los propios bañeros, mientras muchos turistas aceptan las sugerencias, otros no acatan las indicaciones, relativizando las probabilidades de accidentes.
Por temporada se relevan al menos una decena de derrumbes, de distinta intensidad. En otros veranos, se produjeron hechos trágicos por la caída de enormes pedazos de roca arenística compactada que impactó sobre pescadores que estaban debajo de la muralla natural.
La Patrulla Ambiental Urbana dependiente de la Municipalidad local realizó campañas en otras temporadas entregando folletería con esta recomendación que reitera este año, aunque con resultados menos satisfactorios de los esperados.
