KABUL.- Al Qaeda reivindicó ayer el ataque contra agentes de la CIA en Afganistán.
La red de Osama Ben Laden reivindicó el espectacular atentado suicida del 30 de diciembre en el corazón de una base estadounidense de Jost (este de Afganistán). Los talibanes también habían reivindicado el atentado.
Un doble agente infiltrado, el jordano Humam Jalil Abu Mulal al Balawi, supuesto miembro de Al Qaeda reclutado por los servicios jordanos para trabajar para la CIA, se hizo volar en pedazos matando a siete estadounidenses empleados por la agencia, en el ataque más sangriento contra los servicios de inteligencia norteamericanos desde 1983. También resultó muerto un oficial jordano.
El kamikaze vengaba así a los combatientes talibanes "mártires" que murieron por misiles disparados por aviones sin piloto estadounidenses, declaró el jefe de Al Qaeda en Afganistán, Mustafá Abu al Yazid, citado por el centro norteamericano de vigilancia de páginas web islamistas SITE.
Desde la llegada al poder del presidente Barack Obama, que decidió enviar 30.000 refuerzos a Afganistán, Estados Unidos multiplicó sus ataques aéreos en las zonas tribales paquistaníes. El último mató el miércoles a 13 combatientes islamistas, según una fuente paquistaní.
En cualquier caso la violencia en la región no amaina. Un atentado suicida causó 8 muertos y 24 heridos ayer en Gardez, principal ciudad del sudeste de Afganistán, anunció un portavoz de la provincia de Paktia. (AFP)