Las cosas le pasaron de golpe a Leandro Marín. Con apenas 15 años se encontró jugando un Argentino B con la camiseta de Centenario y teniendo de compañeros al Pepe Basualdo, Tito Pompei, Mosquito Cascini y de DT a Oscar Craviotto. Hoy, con 17 (22-01-92), es uno de los juveniles que está de pretemporada con las figuras de un Boca que necesita volver a ser protagonista.
Marín atiende el teléfono después de la cena. Está tranquilo, aunque en el tono de voz hay un hilo de emoción. Comparte la habitación con Sergio Araujo y David Achucarro, dos pibes que también viven el "sueño".
"La verdad es que no lo puedo creer, estoy muy contento de estar haciendo una pretemporada con jugadores de esta jerarquía. Todo va bien, muy bien", dice de arranque el lateral derecho.
-¿Qué te sorprende?
-Estar compartiendo entrenamientos con jugadores increíbles, el lugar, las comodidades, el paisaje. Todo es bárbaro.
-Llegaste a estar en el plantel de primera casi en un pestañeo.
-Sí, porque a Boca llegué en enero de 2008 y me ha salido demasiado bien (risas). Jugué en la selección, ahora estoy en Tandil... No me puedo quejar.
Leandro aterrizó en el club de La Ribera de la mano del viejo gerenciamiento de Centenario. Craviotto y Cascini lo presentaron y en poco tiempo se ganó la aceptación de los técnicos de las inferiores. Jugó el último Mundial sub 17 y hasta llegó a ser titular en el sub 21 que disputó el torneo Esperenza de Toulon, junto a consagrados como el Papu Gómez, Ever Banega, Diego Buonanotte y Diego Perotti, convocado últimamente por Maradona.
-Estuviste en el banco, cuando Banfield salió campeón
-Sí, estaba como atontado, escuchando la hinchada que no paraba de cantar y pensando que se me podía dar en cualquier momento, que Basile me podía llamar para entrar...
-¿Cuál es tu objetivo para este 2010?
-Jugar algunos partidos en primera y con el tiempo consolidarme. Después ver cómo siguen las cosas...
-¿Tenés chances de comenzar a ganar minutos?
-Eso lo tiene que decir Basile, pero yo tengo esperanza de que voy a jugar. Y en cada entrenamiento voy a hacer todo para que el Coco se fije en mí.
Marín, Achucarro, Sergio Araujo, Cristian Erbes y Nicolás Colazo son las nuevas promesas de Boca, que recibieron como "bautismo" un espantoso corte de pelo de Martín Palermo, el Pato Abbondanzieri y Juan Krupoviesa. Araujo debutó contra el Taladro y el cuerpo técnico tiene mucha ilusión en sus condiciones.