? Radicalismo: "Vuelve de un naufragio. El partido estuvo sometido a muchas tempestades: el barco que naufragó sufrió varios embates. Uno propio, la caída del gobierno de Fernando de la Rúa. Ahí no podemos echarle la culpa a nadie, fue una defección propia por no haber tenido un proyecto de poder y un modelo alternativo para salir de la convertibilidad. Pero el otro gran embate fue posterior, y tuvo que ver con un ingrediente foráneo: la deliberada intención de Néstor Kirchner de hacernos desaparecer del mapa, cooptando gobernadores e intendentes y ninguneando o maltratando al radicalismo".
? Radicalismo II: "Ideológicamente el radicalismo está en el mismo lugar de siempre, más allá de algunas defecciones temporales: en la centroizquierda, en la socialdemocracia, en el progresismo republicano. Ahora, en un sistema político que se está reconstruyendo (que quizá no tenga que ver con el bipartidismo tradicional pero sí con la reconstrucción de dos fuerzas de alternancia), nos estamos constituyendo en el eje convocante, pero no excluyente, de una gran fuerza en la cual confluyan otros sectores".
? Radicalismo III: "El país le perdona al peronismo dividirse y puede elegir a uno de los dos candidatos que ofrezca, pero no le perdona al radicalismo que vaya dividido. Existe un parámetro de exigencia diferente por parte de la sociedad, tanto en temas éticos y de gobierno como electorales. El PJ puede ir fraccionado en 25 colectoras y la gente lo ve normal. Si los radicales nos dividimos en dos, dice ´Ahí están otra vez los radicales peleándose entre ellos´. Esto se da así porque el radicalismo representa el inconsciente del ´debe ser´ del argentino medio y el peronismo representa el ´ser´. Nuestro país se debatió durante toda su historia entre el debe ser y el ser sin lograr nunca encontrar el equilibrio justo".
? Cobos: "Cobos es Cobos y hay que entenderlo. Es un político diferente. No está atado a los códigos de la política nacional tradicional. Ahora, si lo que hace es leído desde la mala intención, todos los días se van a encontrar argumentos para separarse o diferenciarse de él. Si se lo lee desde la buena intención, van a encontrar argumentos para entender que es un político diferente. Tiene autonomía y cuesta entenderlo en el marco de los códigos tradicionales de una organización política. Yo soy un orgánico total, pero he aprendido a entenderlo. Y supongo que él también aprendió a entendernos".
? Cobos II: "El radicalismo tiene una formidable, fenomenal y a veces excesiva vida interna. Eso hace que las cuestiones internas se vivan con pasión. Hay radicales que están contentos y deseosos de que Cobos sea nuestro candidato a presidente porque ven en él a alguien que tiene una alta llegada a la sociedad. Y hay otros que no le perdonan lo que hizo con el radicalismo ´K´. Pero en general hay una intención de superar el pasado y construir una alternativa. El radicalismo necesita a alguien con la alta consideración social que tiene Cobos. Y Cobos, a su vez, necesita para su proyección formar parte de una organización, solo no va ni a la esquina. En esa simbiosis estamos. Después de una fractura tan fuerte como la que vivimos la vida matrimonial no es fácil".
? Cobos III: "Por supuesto que me hace ruido que Julio Cobos sea uno de los líderes de la oposición siendo vicepresidente de la Nación. Y la verdad que ese obstáculo institucional en algún momento él lo tendrá que medir, obviamente más cerca del 2011. Cobos va a tener que renunciar o pedir licencia, algo que lo desvincule de la institucionalidad que hoy es un obstáculo. Mi opinión es que cuanto más demore peor es para él y para la UCR. Pero yo también soy muy respetuoso y él tiene otra idea: Cobos cree que la gente le pide que continúe con su mandato porque es una voz de reflexión, de sensatez y de sentido común que equilibra la desmesura, la irracionalidad y la inmadurez que uno advierte desde el Poder Ejecutivo".
? Carrió: "Ella se siente incómoda cuando no lidera con exclusividad. Tendrá que aceptar que la construcción de un proyecto de país supone algo mucho mayor. Ahora, todo esto lo estoy diciendo a partir de una valoración positiva de su figura política. Ella es absolutamente necesaria en esta construcción. Pero una cosa es ser necesaria y otra muy distinta es ser exclusiva".
? Oposición: "Soy de los que creen que la mayor responsabilidad en el tránsito hacia el 2011 no la tiene el gobierno sino la oposición, que también tiene que ser capaz de entender el mensaje de las urnas. Para eso hay que unificar criterios para actuar en el Parlamento. Tenemos que tranquilizar a la sociedad y dar señales de confianza para que la economía vuelva a crecer. Tenemos que marcarle la cancha al gobierno con madurez, grandeza y responsabilidad, pero dejándole las herramientas necesarias para poder gobernar. Hay que encontrar límites pero no asfixiarlo y, mucho menos, impedirle gobernar. Hay que darle gobernabilidad al sistema, evitar que el gobierno se vuelva loco y tome para cualquier lado y darle señales a la gente de que acá hay un sistema político maduro que puede tener alternancia y competencia pacífica".
? Peronismo: "El gran desafío para los radicales es demostrarle a la sociedad que somos capaces de romper el mito de que el país sólo se gobierna con el peronismo en el poder. Por eso, lo primero que tiene que tener esta fuerza es gente convencida, que haya gestionado y que sea capaz de disciplinar y de consensuar con los factores de poder".
? Kirchnerismo: "Es un proyecto desaforado de poder, que implica prácticas y ejercicios definidamente autoritarios. Siempre elige el camino del conflicto, el atajo. Y esto le trae algunas batallas ganadas, pero con altísimo costo. Ese costo se transforma luego en este clima de irritabilidad social, de violencia, de intranquilidad, que no es bueno para nadie: ni para el ciudadano común ni para el trabajador, mucho menos para los que toman decisiones empresarias. Ahí es donde el gobierno está fallando enorme- mente".
? Kirchnerismo II: "Su crisis comenzó a gestarse a principios del 2006, cuando la economía abandonó el rumbo de seriedad, de rigorismo técnico, para pasar a ser una suerte de laboratorio de decisiones unilaterales y pragmáticas conducidas coyunturalmente por una persona en soledad -en aquella época presidente de la Nación, en estos momentos ex presidente- y ejecutada por distintos operadores. En algunos casos, por la grosería de un Guillermo Moreno; en otros, por un tecnicismo que nosotros hemos valorado en otros espacios, como Ricardo Echegaray; también por operadores políticos como Carlos Cheppi, en materia de conflicto del campo".
? Kirchnerismo III: "La sociedad argentina, a partir de algunos episodios que arrancan en el 2006 pero que se concentran en el 2008, empezó a desconfiar de la capacidad del gobierno para tomar decisiones con la racionalidad necesaria para soportar la crisis y salir adelante, para vivir los momentos que vivimos en otros años con este mismo gobierno y de quien lo había antecedido. La crisis de confianza es respecto de quienes tienen que ser los pilotos de la tormenta y que nada tiene que ver con la crisis nacional".
