CIPOLLETTI (AC).- Si el futuro se nutre del pasado, Cipolletti tiene una buena base sobre la que sustentar el sueño de recuperar espacios en el fútbol a nivel nacional. El lunes se cumplieron 32 años de un momento que quedará grabado a fuego en la historia del club: cuando el Albinegro goleó de local nada menos que al Boca del "Toto" Lorenzo.
La expectativa que se había generado alrededor de ese partido fue increíble. Es que a la Visera llegaba el campeón de la Libertadores ´77 y que se jugaba todo para quedarse con el Nacional.
Era la 12ª fecha y Boca (sin el "Tano" Pernía ni "Pancho" Sa) necesitaba los tres puntos para mantener las chances de dar la vuelta. Pero se encontró con un Cipolletti (que no tuvo al "Ruso" Strack) aguerrido y motivado, que estaba ante uno de esos momentos únicos.
Cipo abrió la cuenta con un remate del Bambi Flores que se desvió en la cabza de Suárez y descolocó al Loco Gatti. Empató Perotti de cabeza y unos minutos después Veira le hizo un "sombrerito" al "1" Xeneize y puso nuevamente arriba a Cipo. Sobre el final del primer tiempo volvió a igualar Zanabria con un golazo al ángulo.
El complemento fue todo del Albinegro que puso el 3-2 con un tanto de García a los diez minutos y sobre los 25 estiró Erasuma, luego de que Boca se quedara con uno menos por la expulsión de Tesare (fuerte falta sobre Flores).
La Visera fue una fiesta, mientras que Boca regresó a Buenos Aires masticando bronca porque había quedado fuera de la pelea. De todas maneras, los del "Toto" Lorenzo tuvieron una "revancha" feliz porque un par de meses después ganaron la Intercontinental al derrotar al Borussia alemán.