SANTIAGO.- El candidato de la derecha chilena Sebastián Piñera acusó ayer a su rival, el oficialista Eduardo Frei, de llevar adelante una "campaña sucia" por la presentación de un anuncio televisivo que hace alusión a su riqueza, a menos de dos semanas del balotaje del 17 de enero.
"Si Frei quiere revolcarse en el barro, que lo haga solo", respondió con dureza Piñera, que posee una fortuna valorada en 1.200 millones de dólares y ganó la primera vuelta electoral el 13 de diciembre con 44% de los votos. "Él le está faltando el respeto a una inmensa mayoría de chilenos que ha optado y se la está jugando por el cambio, el futuro y la esperanza, y le falta el respeto porque está insinuando que se están vendiendo", agregó Piñera, que acusó a Frei de realizar "una campaña sucia".
En el reinicio de la franja electoral televisiva gratuita la noche del domingo, el comando de Frei simuló un comercial televisivo de la tarjeta de crédito internacional MasterCard, que señala que todo se puede comprar con ella, para ironizar el poder económico del candidato derechista.
"Zapatos de exclusivo diseño de cuero 3.500 dólares, colleras de oro de 24 quilates, corbata de seda... la banda presidencial no tiene precio. Hay cosas que el dinero no puede comprar, para todo lo demás está ´Tatán card´, señala la parodia, cambiando el nombre de la tarjeta por el apodo con que en Chile se conoce a quienes se llaman Sebastián. Piñera tiene una importante participación accionaria en la línea aérea Lan, una de las más importantes de América Latina, es dueño de un canal de televisión y accionista mayoritario del club de fútbol Colo-Colo, el más popular del país, entre otras inversiones.
"Poner la verdad arriba de la mesa es igual a campaña sucia es una idea muy confusa y equivocada respecto a la democracia. Lo sucio en democracia es ocultar los debates, lo sucio es no hablar abiertamente ante la gente de lo que uno piensa y nuestro pensamiento es que no es bueno la mezcla del poder económico con el poder político", defendió por su parte la vocera del comando de Frei, Carolina Tohá.
El candidato oficialista, que representa a la coalición de centro izquierda que gobierna Chile desde 1990, necesita remontar el 30% obtenido en la primera vuelta, la más magra votación del oficialismo en 20 años. Piñera, en cambio, corre con ventaja al obtener 44% de los votos.
A menos de dos semanas del balotaje, ambos buscan conquistar los votos del tercer candidato en la primera vuelta, el independiente de izquierda Marco Enríquez-Ominami, que obtuvo un 20% y tras perder la elección dejó en libertad de acción a sus adherentes. En los últimos días, Frei ha sumado importantes apoyos como el de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF) y la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la mayor multisindical del país, que llamaron a apoyar al candidato oficialista que gobernó Chile entre 1994 y 2000. Antes había sumado ya a los votantes del candidato del Partido Comunista, Jorge Arrate, que sacó un 6% de votación en la primera vuelta.
Los analistas coinciden en que Piñera puede ganar una elección para la derecha por primera vez en más de 50 años. (AFP)
