TEHERÁN.- El ministro de Exteriores de Irán, Manouchehr Mottaki, dio un mes de plazo a los países occidentales para que acepten su propuesta sobre el enriquecimiento de uranio en el marco de la disputa por el programa nuclear iraní, en un paso que él mismo calificó como un "ultimátum", informan ayer medios locales.

De no ser así, señaló Mottaki, Teherán procederá a enriquecer por sí mismo el uranio que necesita para poner en marcha un reactor nuclear con fines de investigación. Entre tanto, EE. UU. se está planteando seriamente imponer nuevas sanciones a Irán, según "The New York Times" .

Las protestas de la oposición en Teherán así como los inesperados problemas técnicos en el programa nuclear iraní alientan a la Casa Blanca a dar el paso tras una nueva evaluación de la situación. Las medidas sancionadoras que se contemplan se dirigirían en primer término contra la Guardia Revolucionaria iraní.

La organización paramilitar desempeñó un importante papel en la represión violenta de las manifestaciones antigubernamentales que tuvieron lugar como consecuencia de las acusaciones de fraude que empañaron la reelección del presidente Mahmoud Ahmadinejad en junio.

Pese a que todas las sanciones impuestas hasta la fecha no provocaron un cambio de actitud por parte de Irán, los recientes disturbios ofrecen a Occidente "una oportunidad de aplicar sanciones que convenzan a los iraníes de que el precio que hay que pagar por el programa nuclear no merece la pena", citó "The New York Times" a un funcionario. (DPA)