VIEDMA (AV)- Por distintas infracciones el municipio de Viedma retuvo dos autos por día hábil durante 2009. La ingesta de alcohol fue la principal razón de esas medidas. Según se informó los inspectores de Tránsito de la comuna capitalina labraron 7.285 actas de infracciones en el último año. De ellas, 5.289 fueron remitidas al Juzgado de Faltas para su resolución.
Además en ese mismo período fueron secuestrados 579 vehículos por infracciones graves a las normas de tránsito. De ese total, 325 fueron motocicletas y 254 automóviles.
De esta manera, el promedio indica aproximadamente dos vehículos retenidos por cada día hábil.
Los motivos más frecuentes para los secuestros de vehículos fueron la alcoholemia positiva o negarse a hacer el test, lo que fue constatado en 149 casos. Por otra parte menores de edad al volante fue otra de las razones en 58 oportunidades, estadística seguida de cerca por las riesgosas picadas en la vía pública con 20 infracciones.
Con menor frecuencia se sucedieron secuestros vinculados a la falta de documentación, del carné de conducir, de casco en el caso de las motos y darse a la fuga. No obstante. La mayor cantidad de infracciones fueron labradas por estacionar en lugares indebidos, seguida por la falta del comprobante del estacionamiento medido y pago.
Junto a los mayores controles este año se puso en marcha el aula de educación vial, se capacitó con la pista infantil a miles de chicos y el Automóvil Club Argentino -ACA- brindó capacitación con su aula móvil.
La presencia de los inspectores en las calles, la colocación de atenuadores de velocidad y los controles frecuentes en forma conjunta con la Policía lograron en 2009 un mayor control y por ende más cuidados de parte de los conductores, generando -a su vez- una disminución de accidentes. Aunque la falta de conciencia a la hora de sentarse al volante sigue siendo la principal razón de los hechos vinculados a la seguridad vial.
En el radio céntrico viedmense la lucha de los inspectores de tránsito está concentrada en evitar una de las malas costumbres más frecuentes: estacionar en doble en la escuela en épocas de clases, en la puerta de los comercios, del quiosco al que "entro y salgo".
De allí que la política sea generar conciencia a los más chiquitos y a través de ellos garantizar el mensaje a los adultos.