ZAPALA (AZ).-La Zona Franca sigue siendo un proyecto inalcanzable. Los avances de 2009 se miden en cuentagotas y la sensación es que será muy difícil que esta herramienta se ponga en marcha sin una decisión firme de la provincia.
Pese a todo, en el municipio son optimistas y creen que 2010 será un año de realizaciones. Las autoridade apuestan a conformar un combo que incluya Zona Franca, Parque Industrial y Playa de transferencia de cargas del sistema polimodal que permitan sacar del estancamiento económico a toda la zona de influencia del centro neuquino.
"A partir de una gestión del intendente Edgardo Sapag ante el gobernador Jorge Sapag hubo un impulso fundamentalmente en función de las obras de construcción que se realizan en la oficinas aduaneras que la ZF ocupará en el predio ubicado sobre la ruta 22", explicó el secretario de Desarrollo Económico de la comuna, Horacio Pessolani.
Con anterioridad, los funcionarios zapalinos iniciaron negociaciones con las autoridades de Aduanas a nivel nacional con el objetivo de acordar la utilización de un espacio común entre ZF y la Zona Primaria Aduanera.
"Hubo un acuerdo importante: se autorizó el uso conjunto del edificio, construído con las divisiones lógicas", agregó.
Entre los logros que se obtuvieron en el último año se destaca además la habilitación de un ramal ferroviario del tendido que originalmente atravesaba el predio multipropósito con destino al área específica de ZF.
"Hace poco le enviamos a los técnicos de la provincia un resumen de las prioridades que, a nuestro criterio, deberían atenderse de manera urgente a fin de facilitar el desembarco de las empresas en el Parque Industrial como paso previo a la radicación en la Zona Franca y que básicamente son la instalación de los servicios y el cerramiento del parque", dijo el funcionario.
El municipio, que integra junto a la Cámara de Comercio y la provincia el comité de seguimiento del proyecto, quiere concreciones. Los fondos, unos 20 millones que fueron redireccionados del proyecto original del Trasandino con el aval de la Legislatura, tenían como destino otorgar un impulso clave. Sin embargo, el tendido férreo siguió avanzando hacia con destino a la frontera en lugar de priorizar las obras locales.