Sábado 02 de Enero de 2010 Edicion impresa pag. 8 > Regionales
El cártamo y la colza

El cártamo y la colza son especies oleaginosas, rústicas y que permiten la extracción de aceites vegetales, para la producción de biocombustibles.

La colza pertenece a la familia de las crucíferas y, entre sus principales usos, sus semillas son apreciadas por el aceite que contienen.

Se cultiva mucho en Asia, en toda Europa y en Canadá como forraje para cerdos y ovejas y como planta cobertora del suelo, sostienen los especialistas.

Es un cultivo sencillo de sobrellevar "no necesita de agricultores profesionales", se indicó, y pocas plagas pueden afectarla.

La siembra se realiza en la época de otoño-invierno.

Figura entre los primeros cultivos aprovechados por el hombre y hay evidencias de su uso en India varios siglos antes de Cristo. En Argentina el cultivo se conoce desde la década del 30.

El cártamo es hasta hoy es considerado un cultivo secundario, poco desarrollado y utilizado como alternativa en provincias del noroeste.

Según los entendidos, en general el cártamo ha sido utilizado en el país con el doble propósito de pastoreo y oleaginosa, pero su alta proporción de cáscara lo ubicó entre los menos preferidos por la industria aceitera en los años 1960. Por lo tanto, entró casi en el olvido.

Entre sus principales aportes: es una oleaginosa de invierno, por lo que no compite con los cultivos tradicionales, tiene un alto porcentaje de aceite y es importante por su rusticidad y adaptación a condiciones de aridez. (AR)

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