SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Jessica Ojeda, la madre de la niña que permanece internada con un grave daño cerebral, denunció penalmente a la directora del hospital zonal, Susana Rodriguez, por "omisión de auxilio" y "abandono de persona".
A última hora del miércoles Ojeda hizo una ampliación de la denuncia genérica por "mala praxis" que investiga el fiscal Marcos Burgos, dirigida a Rodriguez por las "omisiones" en que incurrió "negándose sistemáticamente" al traslado de Luciana y "a los más elementales requisitos de urgencia y asistencia de personal idóneo y responsable en materia médica".
La presentación señala la responsabilidad de la médica en arbitrar acciones que "tiene exclusivamente reservadas por su alto cargo" para "determinar un diagnóstico definitivo" de la menor. Y destaca que la incertidumbre sobre el cuadro clínico de la menor impidió hasta la fecha "evaluar posibles tratamientos, que morigeren o impidan perjuicios eventuales o terminales".
También se cuestionó la "no imposición de la situación de Luciana ante la Dirección de Emergencia Nacional" que fue solicitada a Rodriguez por la familia y los amigos de la menor.
Ojeda sostuvo que estas circunstancias "acredita y demuestra la desidia e inacción que existe desde la directora del hospital, quien oportunamente y a pesar de no contar con elemento alguno, emitió un diagnóstico de muerte cerebral de Luciana, negándose sistemáticamente a aceptar su derivación alegando públicamente que "?no se puede derivar o trasladar a un muerto".
El miércoles la ministra de Salud, Cristina Uría, le comunicó al juez Civil, Jorge Serra, el compromiso de "arbitrar los medios" para trasladar a la niña al Instituto Fleni. La decisión llegó 30 días después de que el juez ordenara la derivación al hospital Garrahan, en el marco del amparo interpuesto por la familia.
En la denuncia penal Ojeda recordó el informe entregado al juez Civil, Jorge Serra, por la doctora Morresi "desautorizando completamente" a la directora del "Ramón Carrillo" al descartar la existencia de muerte cerebral y requerir "el urgente traslado a un centro de complejidad neurológico".
La familia sostiene que el Garrahan y los demás centros de Salud especializados rechazaron la derivación por el diagnóstico de muerte cerebral y las sugerencias transmitidas por Rodriguez al gestionar el traslado.