| Si todo marcha como se espera, es sólo cuestión de horas que abejas reinas argentinas ingresen al mercado japonés por la puerta grande. El mes pasado se realizó en Tokio un encuentro clave, en la sede del MAFF, donde participaron autoridades de ese organismo, representantes de la Sección Económica y Comercial de la Embajada Argentina en Japón y el responsable del Programa de Control de Enfermedades de las Abejas del Senasa, Mariano Bacci. Según se informó desde Senasa, durante el encuentro se avanzó en los aspectos sanitarios del modelo de certificado que acompañará las exportaciones de abejas reinas producidas en la Argentina hacia Japón. De regreso en la Argentina, el representante del Servicio incorporó las modificaciones pautadas al certificado y remitió la versión final al MAFF para su aprobación. Según datos de los últimos 4 años, Japón importa aproximadamente 16.000 reinas por año. Hasta ahora se las compraba a Australia, se mencionó, pero a raíz de algunos problemas sanitarios con este país, buscan alternativas en Sudamérica. Es así que si el negocio prospera, de las últimas más de 13.000 abejas reinas que se comercializaron, el volumen podría incrementarse notablemente. Desde 1998 se inició en el país la comercialización de reinas al exterior. En un principio sólo se exportó a países de la Unión Europea, principalmente Francia e Italia, y luego se sumaron destinos como Líbano, Libia, Emiratos Árabes. En el 2005, se vendieron más de 10.000 ejemplares y en 2008 se superaron las 13.000 con destinos tan variados y lejanos como Alemania, Francia, Grecia, Italia, Jordania, Líbano, Libia y Reino Unido. "La UE es el principal comprador, de las alrededor 12 mil reinas vendidas, el 80% fue a la UE. Hay demanda de otros mercados como el de Estados Unidos, Canada, Israel, Mexico. Pero son muy exigentes y por el momento no tenemos acceso", apuntó Bacci. Buen viaje, con comida y nodrizas El envío del material apícola vivo es todo un tema, además, ya que debe viajar bajo condiciones de mucho cuidado en los aviones. Según pudo conocerse, las abejas son trasladadas en unas cajas especiales de varios niveles, duras, que deben soportar peso y ser resistentes al agua. En algunos casos, se indicó, en este tipo de cajas pueden viajar hasta 800 reinas. Y en general no sólo se toman todas las precauciones posibles sino que además la carga viaja asegurada. Cada ejemplar se ubica en una jaula pequeña con alimento, explican los expertos, y va acompañada por alrededor de 15 abejas nodrizas que son las que la alimentan durante el trayecto. Además se les coloca en un extremo de la jaula alimento para el viaje. | |