VIEDMA (AV).- Las economías sociales que incluyen actividades de pequeños grupos, como las hortícolas y ladrilleras, entre otras, serán reconocidas como productivas en Río Negro.
Así lo fija la ley aprobada por unanimidad durante la última sesión de la Legislatura y que se cerró con el aplauso de legisladores y público presente. Se trató del primer proyecto de ley que se presenta en Río Negro en el marco de la iniciativa popular y con la firma de 13.000 rionegrinos y la adhesión de distintas organizaciones sociales, incluido el Obispado de Viedma.
La propuesta surgió hace dos años por iniciativa de algunas organizaciones, incluida la Vicaría de la Fraternidad de esta capital, bajo la reconocida figura de Jorge Kelly, quien trabajó incansablemente y no alcanzó a ver trasformada esta propuesta en ley.
Roberto Kilmeatte, uno de los impulsores que estuvo presente en la sesión, sostuvo que siempre se tuvo la idea concreta que "el mecanismo del mercado de la estepa es una forma y un estilo de vida que se transforma en una economía social".
En este sentido dijo que se debe distinguir lo social de lo económico porque la economía debería ser social a pesar que algunos economistas cada vez se olvidan más de lo social.
"Hablan mucho de números y especulaciones económicas pero se olvidan del contexto social por la cual la economía nació", dijo. Kilmeatte resaltó la importancia de esta iniciativa y del camino de juntar firmas que "justifica lo social".
Con la aprobación de la ley se inicia el trabajo de la implementación de esta norma en la provincia que apuesta a la gente que se asocia con el centro en el hombre y su trabajo.
El paso siguiente, además de la promulgación y reglamentación, es determinar cómo será implementada en los distintos municipios.