Un segundo obispo irlandés presentó su dimisión al papa Benedicto XVI a raíz de un informe que acusa a la Iglesia católica de haber encubierto los abusos cometidos por sacerdotes pedófilos en la región de Dublín, anunció el miércoles su diócesis "Presenté hoy mi dimisión como obispo de Kildare y Leighlin al Santo Padre", declaró James Moriarty, de 73 años, en un comunicado difundido por su oficina.
"Espero que esto honre la verdad descubierta por las víctimas aún vivas (de estos abusos) y abra la vía a un futuro mejor para todas las personas implicadas", agregó Moriarty.
James Moriarty fue entre 1991 y 2002 obispo auxiliar de Dublín, en la diócesis en la que cientos de niños sufrieron abusos sexuales cometidos por los sacerdotes durante varias décadas.
El 17 de diciembre, el Vaticano anunció que el Papa había aceptado la dimisión de un primer obispo irlandés, Donal Murray, implicado por el informe Murphy.
Este informe, publicado a finales de noviembre en Irlanda, acusaba a Murray, obispo de Limerick (oeste), de haber actuado de forma "inexcusable" al disimular informaciones sobre las víctimas de las sevicias sexuales de los curas.
AFP.