NEUQUÉN (AN).- Liliana Planas, esposa del ex gobernador Jorge Sobisch, murió ayer trágicamente al arrojarse al vacío desde el noveno piso del edificio de calle Brown al 700 donde vivía. Fuentes judiciales y policiales confirmaron que la mujer atravesaba un cuadro depresivo y estaba siendo medicada. Ayer al mediodía el gobierno provincial decretó tres días de duelo oficial.
El superintendente de Seguridad de la policía, Raúl Adolfo Liria, confirmó la identidad de la esposa de Sobisch y el "presunto" suicidio. De acuerdo a la reconstrucción de los peritos, Liliana Planas estaba separada de Sobisch desde hacía algún tiempo. La mañana de ayer la mujer estaba vestida con ropa deportiva. Tenía unas zapatillas blancas, un pantalón de buzo oscuro y una remera blanca de mangas cortas. Así recibió a la empleada, que llegó unos minutos antes de las 8. Cerca de las 8:15 sonó el celular de Liliana y como ya era costumbre lo atendió la joven que le ayudaba con los quehaceres hogareños.
La llamada era de la hermana de Liliana, quien se encontraba en San Juan. La empleada le pasó el celular y se fue para continuar con sus tareas.
No habían pasado 10 minutos cuando golpearon a la puerta del departamento y al atender la empleada un policía le informó que Liliana Planas yacía sin vida en el frente del edificio que da a calle Brown.
La hora de la muerte se estableció a las 8:20 y los motivos todavía no han sido aclarados aunque el superintendente de Investigaciones explicó a los medios que "aparentemente había algunas circunstancias depresivas y de medicación".
La empleada se habría encargado de dar aviso a Jorge Sobisch y sus hijos. El ex gobernador fue el primero en llegar, de jean, zapatillas y una remera blanca; después lo hicieron los hijos. El cuerpo de Liliana Planas estaba cubierto con una frazada y a pesar de que los policías le negaron la posibilidad de verlo, Sobisch insistió hasta que le permitieron abrazarlo cubierto con la frazada. La dolorosa escena fue presenciada en silencio por los presentes.
Personal policial montó un cerco para evitar que la prensa y los curiosos se acercaran y con nailon negro cubrió el ingreso al edificio para que pudieran trabajar la fiscal de Graves Atentados Contra las Personas, Sandra González Taboada, y los peritos. Después el cadáver fue trasladado al Cuerpo Médico Forense donde se le practicó la autopsia.
El jefe de la policía Juan Carlos Lepén se puso a la cabeza del dispositivo de seguridad junto al secretario de Estado de Seguridad Guillermo Pellini. Lentamente se pudo observar el arribo de figuras del gobierno sobischista como el ex vicegobernador Federico Brollo y el ex diputado provincial Oscar Gutiérrez.
Fuentes judiciales confiaron que además de numerosos medicamentos, en el departamento se encontró una carta sin fecha dirigida a "Federico". Otro escrito, hallado dentro de un libro, no dirigido a nadie en especial, daría cuenta del estado de ánimo que envolvía a la víctima. Los responsables de la investigación no identificaron un disparador inmediato para la trágica decisión adoptada por Planas.