ROCA (AR).- Después de la polémica desatada por el corte de los accesos al Área Protegida de Paso Córdoba, los integrantes de la comunidad Leufu Che y las autoridades del municipio de Roca decidieron ayer postergar el tratamiento del tema hasta febrero del próximo año.
Durante este tiempo, los pequeños crianceros levantarán el alambrado que habían instalado en el camino que lleva a la costa del río Negro y, a cambio, el municipio evaluará una serie de medidas para mitigar los efectos que producen los visitantes en esta zona ribereña.
El acuerdo surgió luego de una extensa reunión que se realizó en el Concejo Deliberante de Roca. Hasta ese lugar llegó el lonco Osvaldo Simón y un grupo de crianceros que viven en la zona de Paso Córdoba. Del otro lado, el intendente Carlos Soria estuvo acompañado de varios de sus funcionarios, quienes fueron aportando información para destrabar el conflicto. Como mediadora intervino Gloria Velázquez, integrante de la Casa de Justicia de Ingeniero Jacobacci y especialista en temas indígenas.
Reclamo y solución
Durante el encuentro el director de Catastro, Raúl Néboli, explicó detalladamente cuáles eran las tierras pertenecientes al municipio y confirmó que el alambrado que se construyó hace pocos días (en el límite entre los lotes 10 y 11) se colocó sobre tierras que pertenecen al municipio.
En medio de la reunión, los integrantes de la comunidad volvieron a insistir sobre los problemas que padecen diariamente por el acceso "irresponsable" de muchas personas que no respetan sus tierras ni el medio ambiente. "Nos matan los animales y no podemos hacer absolutamente nada. Estamos cansados", se quejó uno de los pobladores.
Esta vez fue el propio intendente Soria quien pidió más diálogo y tiempo para buscar una salida consensuada. El problema es que la temporada de verano ya se abrió, y según el jefe comunal, resultaría imposible trabajar en un proyecto en conjunto a esta altura del año.
"Denme tiempo hasta que termine la Fiesta de la Manzana. Yo les prometo que el 14 de febrero nos vamos a juntar a buscar soluciones en conjunto", les pidió el jefe comunal.
También se comprometió a instalar cartelería y a poner en funcionamiento una "guardia ambiental" para realizar un control de los acceso a la zona del Área Protegida, con costosas multas para aquellos que no respeten las tierras privadas ni el ganado.
Tras un cuarto intermedio, los crianceros decidieron firmar el acta de acuerdo y levantar el corte del acceso al club Náutico. La tranquera ubicada en otro camino paralelo que también lleva a la zona del Área Protegida quedará abierta pero solamente de día.