CIPOLLETTI (AC).- "(Alex) Velázquez Barrientos supo lo que hacía -y en consecuencia dirigió sus acciones- ya que previó, estudió, analizó, ejecutó coordinadamente, tanto respecto al horario, al oportuno escalamiento, al acechar, al ingresar, durante el ataque, al egresar de la morada, al retirarse del lugar del crimen, con el ocultamiento y la eliminación de las ropas ensangrentadas y del arma homicida. No actúo a tontas y a locas, o en forma inconsistente sino con un plan preordenado, el que ejecutó eficazmente. Habiendo sido delatado con su actuar negligente en el tiempo previo, más el imponderable de haber dejado sembradas su huella dactilar al ingresar en el lugar del hecho y la huella genética al salir", consideró el Tribunal al analizar la imputabilidad del acusado por el crimen de Agostina.

"La nocturnidad -agregó- no fue un azar, fue una opción elegida, querida, buscada, convenientemente estudiada, aprovechada oportunamente, propio de quien estuvo al acecho de su víctima. No fue casual como sostiene el defensor -que se levantó en medio de la noche con ganas de matar-. El psicópata es capaz y comprende, la idea esbozada por el defensor, del demente que se levanta en medio de la noche a matar, es una hipótesis relatada por la defensa sin sostén fáctico en el expediente, que además fue descartado unánimemente por la junta médica psiquiátrica y psicólogos intervinientes".

Los jueces coincidieron en afirmar que Velásquez Barrientos es "imputable" y que actuó con ensañamiento y alevosía. Describieron que realizó la muerte "por agonía, con sufrimiento, dirigiendo el ataque con el arma blanca hacia el rostro de la menor víctima, afectando principalmente el brazo izquierdo y manos con las que instintivamente trató de protegerse, dándole una sola estocada profunda en el pecho que le produjera el hemotórax, falleciendo en el traslado hacia el hospital".

"Podemos afirmar -concluyeron- que fue buscado (aspecto psicológico) el hacer sufrir por parte de quien justamente le dicen "Chucky" alegóricamente, justamente relacionándolo con el muñeco maldito de los film de terror, que se dedica a matar de las formas más alevosas y siniestras, empeñado en destrozar los cuerpos que ataca, así remedando a su personaje busco hacer sufrir, mató ensañándose".