BUENOS AIRES.- El Sindicato de Camioneros continuará con el paro de transporte de combustible que afecta a la firma Esso. Lo ratificó anoche, Pablo Moyano, el hijo del secretario general de la CGT que conduce el gremio, tras una reunión con autoridades de la compañía.

Los camioneros no permiten la salida de los vehículos de las plantas de la petrolera ubicadas en las localidades de San Lorenzo, Campana, Bahía Blanca y Caleta Paula, en Santa Cruz.

José Lobrutto, secretario de la rama del Combustible del gremio, adelantó que hoy tendrá lugar una audiencia a partir de las 14 en el Ministerio de Trabajo para tratar de llegar a un acuerdo.

"Si no hay una solución, se irá al paro general (para el traslado) de combustible a nivel nacional", indicó.

Ayer por la tarde, según reveló Moyano, hubo gestiones con la empresa, pero sin que se encontrase salida.

La medida de fuerza del gremio camionero busca frenar la decisión adoptada por la petrolera Esso de tercerizar el envío de combustible por transportistas que no están afiliados al sindicato.

Según Lobrutto, "la medida se dispuso por la contratación de choferes en negro, y por la mitad del sueldo correspondiente tal como marca la ley". El dirigente denunció que la empresa "para bajar costos, no le importa los trabajadores, ni la seguridad, ni nada".

"Menores requisitos de seguridad"

El dirigente sostuvo que la decisión de Esso implica que el camionero contratado por la petrolera "cada día tenga menos trabajo", e indicó que al mismo tiempo se beneficia a otros que cobran "un poquito más barato" este servicio, y al que se le solicita "menores requisitos de seguridad".

Según el gremialista, Esso entrega su combustible a este servicio de transporte, que luego "revende el combustible a las estaciones de bandera de la compañía". (DyN)