WASHINGTON.- El último senador demócrata que faltaba convencer dijo ayer que apoyará la reforma del Sistema de Salud que impulsa el presidente estadounidense, Barack Obama. El parlamentario de la Cámara Alta, Ben Nelson, contestó a la prensa con un escueto y contundente "sí", tras ser consultado sobre si apoyará o no la medida impulsada por el mandatario norteamericano. Poco antes, en su mensaje semanal de los sábados, Obama había denunciado que las aseguradoras médicas están "gastando millones de dólares para impedir la reforma" porque el actual sistema "funciona mejor" para esas empresas "que para el pueblo" norteamericano.
Detalles
Estados Unidos carece de un sistema de salud público y gratuito, y el proyecto impulsado por la Casa Blanca prevé la posibilidad de que 48 millones de estadounidenses puedan acceder a una cobertura médica.
Con el voto de Nelson, los demócratas consiguen una mayoría de 60 de los 100 integrantes del Senado y garantizan así la aprobación de la reforma sin que la oposición republicana pueda presentar obstáculos al procedimiento.
Obama declaró por radio que la versión que ya fue aprobada en la Cámara de Representantes como la que se está discutiendo en el Senado harán que sea "ilegal que las aseguradoras nieguen cobertura por motivo de una condición preexistente o enfermedad".
"Cuando sea promulgada, las familias ahorrarán en primas" y "las pequeñas empresas y los estadounidenses que no tienen seguro por medio de sus empleadores ya no se verán obligados a pagar precios exorbitantes para tener seguro".
La Oficina Presupuestaria del Congreso calculó que la medida revisada reduciría el déficit en 132.000 millones de dólares a lo largo de la década y en mucho mayor medida en el decenio siguiente. "Es el mayor plan reductor del déficit en una década", dijo Obama. "El presidente país está "al borde de hacer realidad la reforma de la salud", agregó.
En la actualidad, pedir una ambulancia en Estados Unidos puede costar 500 dólares y dos días de internación en una clínica cerca de 10.000. Nelson dijo en conferencia de prensa que dio su apoyo al obtener concesiones que limitan la cobertura del aborto en nuevas pólizas de seguros.
"Sé que esto es difícil de aceptar para algunos de mis colegas y reconozco su derecho de disentir. Pero yo no hubiera votado a favor de este proyecto sin estas cláusulas", dijo.
Añadió que también frustró los intentos de crear una opción de seguros estatal que compitiera con el sector privado.
Previamente, el líder del bloque mayoritario, Harry Reid, dio a conocer la nueva versión del proyecto, que el Senado intenta someter a votación antes de Navidad. La medida obligaría a las aseguradoras a gastar el 80% de sus primas de pólizas individuales y el 85% en el caso de las pólizas grupales en atención médica. Con ello se limitarían los costos permanentes y los beneficios. No se podría negar atención médica a los menores de edad. En cuanto al aborto, la medida permitiría a los estados eliminar la cobertura del aborto de las nuevas pólizas de seguros.
Apoyo
La viuda del senador estadounidense Ted Kennedy, fallecido a fines de agosto, exhortó ayer aprobar la reforma del sistema de salud del presidente Barack Obama, caballo de batalla de su marido, en una columna publicada en el sitio de internet del Washington Post. El "león del Senado", figura de la izquierda estadounidense y fallecido a raíz de un tumor cerebral, creía que "este año las estrellas estaban finalmente alineadas para permitir a nuestro país adoptar una reforma fundamental", escribió su viuda Victoria Kennedy.
"El proyecto de ley presentado al Senado, si bien imperfecto, permitiría alcanzar muchos de los objetivos por los cuales Ted batalló durante los cuarenta años que pasó promoviendo el acceso para todos los estadounidenses a una cobertura médica accesible y de calidad", agregó. (Télam, AP y AFP)