SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El servicio de Pediatría del "Ramón Carrillo" aseguró ayer que el cuadro clínico de Luciana Pérez, la niña de dos años internada con un grave daño cerebral, "no se ha modificado" desacreditando las versiones que indicaban una "supuesta mejoría".

El parte oficial aclaró que la segunda derivación ordenada el jueves por el juez Jorge Serra tiene por objetivo "realizar una valoración en un centro que cuente con la complejidad en neurología infantil para completar los estudios que no se han podido hacer Bariloche, y así, poder definir un pronóstico".

Los directivos aseguraron que "nunca se le planteó desde la Institución a la familia la donación de órganos" y que la historia clínica de la niña está a disposición del magistrado que investiga la denuncia de mala praxis.

En relación al cuadro de Luciana, que lleva 20 días internada en terapia intensiva, se detalló que llegó al hospital con "un cuadro grave de sepsis (infección generalizada) a punto de partida de un foco respiratorio (neumonía)".