NEUQUÉN (AN).- La ley que convocará al foro o congreso educativo para programar las perspectivas del sistema a largo plazo está prácticamente lista, aunque para extender los consensos hacia todos los sectores involucrados, se aprobará recién en las primeras sesiones del año que viene. Pero la idea original de convocar al espacio sigue firme para el 2010.

Tanto oposición como oficialismo están interesados en que así sea y esperan lograr los acuerdos externos que, por el momento no se alcanzaron. El principal es el gremio de docentes ATEN, que ya advirtió que resistirá cualquier iniciativa que no incluya al CPE. Esta objeción estaría saldada, ya que en el borrador de la iniciativa de ley que estuvo a punto de aprobarse este año pero que se postergó para el que viene, el cuerpo colegiado está contemplado en todas las etapas del proceso.

El proyecto está en manos de los integrantes de la comisión de Educación, que preside Silvia de Otaño (MPN). De la oposición, Ariel Kogan (PJ) también aportó en el texto que tiene el aval de la vicegobernadora Ana Pechen. Incluso, fuentes legislativas confirmaron que la decisión de frenar el tratamiento a último momento fue de la ex rectora de la Universidad: pretende convertirla en la vía para recuperar el consenso y la construcción política perdida en los últimos meses, además de tener un especial interés por su vínculo con la actividad académica y educativa.

"La idea con el foro es plantear las políticas educativas para los próximos 50 años. Por eso es necesario que opinen todos, desde docentes, los padres, la iglesia y todos los sectores vinculados", remarcaron desde el entorno de la vicegobernadora.

En este sentido, el proyecto define tres etapas: difusión, desarrollo y conclusión. En las tres y "para alcanzar la mayor participación", se tendrá en cuenta la participación de los Estados nacional, provincial y municipal; del CPE, de organizaciones sociales (iglesias de diferentes credos, sindicatos, organizaciones de trabajadores, pueblos indígenas y organizaciones empresarias); alumnos, padres y docentes, la UNC y especialistas.

El principal escollo que tiene por delante el foro educativo es que, al no haberse aprobado la ley en el actual período y como el próximo comenzará el 1 de marzo, no será hasta esa fecha que se podrá disponer de la norma legal. Ese plazo condiciona las actividades, ya que cualquier oposición u objeción al trabajo aplazará al menos hasta abril el inicio del período de consultas.