Se cumplió ayer un apagón de celulares entre las 12 y las 13, impulsado por asociaciones de consumidores, que consideraron un "éxito" la protesta.

Se reclamaba contra tres aumentos: el impuestazo tecnológico que grava productos que no se elaboren en el país, el incremento en el valor de los mensaje de texto y el nuevo impuesto por el cual los usuarios financiarán al deporte olímpico. La protesta fue considerada un "éxito" por los organizadores, que repetirán la medida de protesta el 12 de enero próximo.

La titular del Centro de Educación al Consumidor (CEC), Susana Andrada, aseguró que "la movida de apagar el celular" tuvo buena adhesión en "muchas ciudades del interior, como Córdoba, Santa Fe y Neuquén".

"No podemos cuantificar la protesta, sencillamente porque las empresas de telefonía celular no nos brindan ese tipo de datos, pero tenemos diferentes indicadores que prueban que mucha gente se sumó al apagón", explicó Andrada en un comunicado.

"Sólo en Facebook el grupo ´Apaguemos los celulares´ llegó en un mes a 15.000 miembros, sin contar la aparición de grupos similares que replicaron la propuesta y contaron también con siete mil o diez mil personas", destacó. Por su parte, el titular de Consumidores Libres, el ex diputado Héctor Polino, sostuvo que la medida "fue todo un éxito. Se protestó en contra del aumento a los mensajes de texto de 56 % y por la aprobación del Congreso del impuesto del uno por ciento a los abonos de la telefonía celular para financiar la creación del Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo", remarcó. Ambos adelantaron que la protesta se repetirá el martes 12 de enero entre las 12 y las 13.

El 3 de diciembre, el Senado convirtió en ley un proyecto por medio del cual se crea un ente de promoción del deporte de alto rendimiento, que se financiará con un impuesto al uso de los teléfonos celulares. El nuevo cargo es del 1% sobre las facturas de los usuarios que tengan el sistema de abono, lo que representa un aumento promedio de 50 centavos.