Lanús necesitaba apenas un empate para meterse en la fase de grupos de la Libertadores y arrebatarle el sitial a Colón (va al repechaje). Ante su gente y en casa, igualó 0-0 con Independiente y terminó de la mejor manera el año, volviendo a la máxima competencia continental.
El Rojo en tanto, realizó la mejor campaña de los últimos años, estuvo hasta el final en la pelea y se dio el lujo de ganarle a los cuatro "grandes", de visitante, en este Apertura.

Lanús arrancó con la premisa de que un triunfo o un empate lo pondría directamente en la Copa, y de entrada no especuló con una hipotética igualdad y salió a la caza del Rojo. A los 4' fue el primer indicio de que el Granate quería los tres puntos. Salcedo entró al área apareado por Galeano, pero su remate se fue apenas desviado.

Independiente intentaba progresar, pero tenía problemas de traslado. La inclusión de Luciano Vella como volante por derecha no le dio resultado al Tolo Gallego. Ni el Tano ni Tuzzio, en posición de lateral, fueron rueda de auxilio por ese sector.

El Rojo tuvo que recostar entonces su juego por la izquierda y apostar a la movilidad de Walter Busse y Darío Gandín, de lo más activo de Independiente en la etapa. Fue Busse quien a los 24' tuvo la posibilidad la primera posibilidad clara, pero su remate se fue apenas desviado. A los 36', el Chipi desbordó bien por la izquierda, pero su disparo fue bien controlado por Marchesin.

Lanús en tanto, siguió inquietando con el paraguayo Salcedo, en un duelo aparte con Galeano y con Cristian Menéndez, que a los 27' no pudo con Gabbarini.

A la vuelta de los vestuarios, al Rojo le seguía costando mantener la pelota a causa de la presión que le imprimía Lanús. El Granate no tenía gran claridad, pero era insistente y en los pies de  Blanco tuvo en dos ocasiones el desnivel, pero el volante perdió  las chances ante  Gabbarini.

El Tolo buscó reabrir el carril derecho con la entrada de Martín Gómez por Vella, y preocupar algo más al fondo local, que sin embargo siguió pasando una noche sin grandes sobresaltos para meterse en la ansiada Copa 2010.