Hay un dato no menor que la gente de Banfield maneja con prudencia. Martín Palermo arrastra una sequía en el Apertura de 741 minutos y no marca desde el 25 de octubre ante River (1-1) por la 10ª fecha. Más allá del dato estadístico negativo, el Taladro quiere por sobre todas las cosas que el ´Titán´ no se despierte justamente mañana, en la definición del campeonato.
Pero Palermo, quien nunca padeció tanto tiempo sin marcar desde que está en Boca, buscará cerrar el año convirtiéndole al puntero y evitando que el conjunto del sur bonaerense se consagre campeón en la Bombonera.
Ayer durante la práctica en Casa Amarilla, Palermo dos goles, uno de ellos de penal, mientras que el otro fue tras una muy buena jugada con Pablo Mouche, quien sería su acompañante en el ataque ante el Taladro.
El ingreso o no de Mouche se dará de acuerdo al puesto que ocupará Nicolás Gaitán. Con el alta médica por su traumatismo en el pie izquierdo, el juvenil que ha sido el mejor jugador de Boca en lo que va del Apertura, podría suplir a Guillermo Marino en la mitad de la cancha o jugar como acompañante de Palermo arriba. Si se da esta última situación, Mouche ocupará un lugar en el banco de los suplentes.
Por otro lado no deja de sorprender que Julio César Cáceres haya jugado ayer para los titulares en la práctica. El paraguayo, que está prácticamente afuera del Boca 2010, es una fija para jugar ante Banfield lo que podría ser su último encuentro con la camiseta azul y oro.
Por lo demás, tal como se preveía, los juveniles Cristian Erbes y Nicolás Colazo quedaron prácticamente confirmados como titulares y ocuparán un lugar en el mediocampo xeneize.