Los saurios se originaron en la región que actualmente ocupa América del Sur, según afirman paleontólogos estadounidenses sobre la base del análisis de características del cuerpo de un ejemplar de 213 millones de años de antigüedad, en un artículo publicado en la revista "Science".
La conclusión llegó luego del estudio de un esqueleto casi completo de un dinosaurio carnívoro en Nuevo México. A este animal lo llamaron Tawa hallae, en honor al Dios del Sol y se desplazaba en dos patas. Pero una de las contribuciones más importantes de Tawa a la ciencia es que aclara la situación del herrerasaurio, un dinosaurio encontrado en la provincia de San Juan en los años sesenta y que algunos situaban fuera del linaje de los terópodos, indica la Universidad de Texas.
En palabras de Sterling Nesbitt, primer firmante del artículo que publica Science, "las características de Tawa sitúan al herrerasaurio en el linaje de los terópodos, así que eso significa que los tres linajes están presentes en lo que hoy es América del Sur muy pronto tras la aparición de los dinosaurios".
"Sin Tawa, podíamos pensar que es así, pero Tawa refuerza esta hipótesis", agregó.
Durante el Triásico (entre hace 251 y 199 millones de años), mientras se separaba Pangea en los protocontinentes norte y sur, los dinosaurios eran raros. Estos dinosaurios primitivos no dominaban la fauna terrestre todavía y constituyen únicamente alrededor del 6% de los fósiles de animales de cuatro patas de aquella época.
Sin embargo, los parientes cocodrilianos eran comunes. Durante este período fue cuando los dinosaurios se diversificaron en tres grupos diferentes: terópodos, sauropodomorfos y ornistiquios.
Científicos encabezados por Sterling Nesbitt de la Universidad de Texas en Austin hallaron en Nuevo México los restos de varias especies de saurios hasta ahora desconocidos del Triásico, una era en la que los saurios se encontraban en el inicio de su evolución.
Entre ellos había el esqueleto casi completo del terópodo Tawa. Tenía un largo de unos dos metros y una altura de 70 centímetros, indicaron los expertos. Debido a que el esqueleto era de un animal joven, se presume que los adultos tenían un tamaño alrededor de un tercio mayor.
Tawa es un animal particular por sus características, indicaron los paleontólogos. Su pelvis -agregaron- se asemeja a la de los antiguos saurios carnívoros, mientras que sus vértebras con indicios de sacos aéreos parecen las de los parientes primitivos y posteriores.
Además, el animal presenta similitudes con herrerasaurio, cuyo papel en la evolución de los saurios es controvertido.
Las características de Tawa muestran que éste pertenece a la línea evolutiva principal de los lagartos, que presumiblemente tuvieron su origen en la actual Sudamérica. Esta teoría es respaldada por otros dos hallazgos de saurios en el mismo lugar, que entre ellos presentan menos similitudes que con los saurios de América del Sur.
La evolución de los saurios comenzó en el Triásico, cuando existía Pangea.
La antigua división en los saurios carnívoros, a los que mucho después se sumó el Tyrannosaurus rex, los gigantescos saurisquios herbívoros y los ornitisquios, como el stegosaurio, es discutido entre los expertos debido a la rareza de los hallazgos de representantes de la época primitiva. (DPA/AN/El País)