El Superior Tribunal de Justicia dejó ir al ex juez Pedro Funes sin juzgar las graves acusaciones en su contra, pero ahora los tres fiscales de Viedma podrían sufrir las consecuencias de las irregularidades y demoras detectadas en su Juzgado.
Así parece surgir del requerimiento que recibieron ya Daniela Zágari, Ricardo Falca y Marcelo Álvarez, para que informen a la auditoría sobre su responsabilidad en las demoras de los expedientes citados.
Días atrás se supo que el Superior Tribunal de Justicia aceptó la renuncia del juez Pedro Funes a pesar de la existencia de graves cargos por incumplimiento en su contra, ratificados por los sumarios realizados por los camaristas Eduardo Giménez y Edgardo Albrieu.
Este último concluyó que en el juzgado de Funes había más de 100 expedientes atrasados -algunos de ellos sin ningún movimiento desde su ingreso- y en otros ámbitos trascendió que podrían ser hasta el doble de esa cifra.
El auditor judicial general subrogante, Pablo Estrabou, pidió ahora informes a los fiscales sobre su participación en esas causas, algo que -según se supo- provocó malestar en los funcionarios.
Ocurre que los fiscales recordaron que numerosas veces pidieron al magistrado el pronto despacho de los asuntos, sin obtener las respuestas con la celeridad que pretendían.
