CENTENARIO (ACE).- Luego de las escaramuzas y el escándalo ocurridos frente al palacio municipal el miércoles, la comuna volvió a funcionar ayer en medio de la tensión, con nutrida presencia policial y sin que se vean alternativas de solución al conflicto que se inició hace dos meses por demandas salariales.
El intendente Javier Bertoldi y su gabinete ingresaron ayer alrededor de las 7 custodiados por la policía. Las tres carpas de protesta continúan en la plaza San Martín, y a diferencia del día anterior, los municipales ignoraron el ingreso de los funcionarios.
El subsecretario de Seguridad de la provincia, Guillermo Pellini, se excusó el miércoles de intervenir en la complicada situación local con el argumento de que "rige la conciliación".
Esto, pese a que en un mes no hubo audiencias de parte, el gremio desconoció la intervención en la cartera laboral y no se efectivizó la medida cautelar de volver a fojas cero el conflicto porque el paro nunca se levantó.
El subsecretario Ricardo Fernández dijo que se llevan a cabo "negociaciones", cuyo tenor se desconoce ya que ni el Ejecutivo ni los municipales dicen tener novedades de la cartera laboral.
Pellini hasta se excusó el miércoles hasta de dar la orden a los bomberos -que estaban a una cuadra- de apagar los neumáticos que ardieron por más de tres horas en la vereda, consumiendo parte de la copa de los árboles del frente de la comuna. "Que la justicia lo defina", dijo mientras se quemaban las cubiertas.
En el ingreso de ayer no hubo gritos ni insultos como en otras oportunidades, y no se avanzó sobre los funcionarios como ocurrió el lunes y el miércoles.
La atención al público se realizó por una puerta lateral y el retiro del personal que no está adherido al paro se hizo con el mismo operativo; aunque a la salida si hubo algunos insultos.