ROCA (AR).- Un grupo de internos del Pabellón Nº 1 de la ex Alcaidía de Roca incendió varios colchones anoche, para reclamar que un hombre que se encuentra detenido en el penal de esta ciudad pueda salir a ver a su hija de dos años, internada con un cuadro grave de salud en la terapia intensiva del Sanatorio Juan XXIII de Roca. El ministro de Gobierno de la provincia, Diego Larreguy, el fiscal Miguel Fernández Jahde y el juez Aldo Rolando estuvieron en el Penal II encabezando las negociaciones. Sobre las 22.15, según trascendió, se autorizó el traslado del interno, con custodia, a centro asistencial donde está internada la chiquita. Con la anuencia de las autoridades del sanatorio se habilitó una visita excepcional fuera de horario para que el detenido pueda ver a la nena "por 15 minutos".
El hombre que impulsó el reclamo es José Bertoia. Tiene 31 años y está detenido a disposición de la Cámara Criminal Nº 2 de esta ciudad. Según él mismo afirmó en una comunicación con este medio, el viernes comenzó a solicitar una autorización para ir a ver a su hija y hasta la noche de ayer no la había conseguido. "Está en terapia intensiva, parece que tiene la Gripe A y no me dejan ir a verla? ¿Qué pasa si mi hija se muere?", afirmó.
Una columna de humo podía verse anoche desde el frente del penal que da a la calle Maipú y varios guardias con itakas estaban apostados en el murallón perimetral, ante la posibilidad de que los confusos episodios dentro del Pabellón Nº 1 dieran lugar a un nuevo intento de fuga, tras cuatro evasiones registradas entre el miércoles y el viernes de esta semana.
Larreguy, el fiscal, el juez, un médico policial y las autoridades del penal estuvieron reunidos anoche en la guardia para resolver la situación planteada en el pabellón, donde se alojan 53 detenidos. De acuerdo con lo que indicó un profesional médico, "no hubo personas afectadas por el humo". Sin embargo, internos que dialogaron con este medio afirmaron que al menos dos detenidos debieron ser sacados del sector por problemas respiratorios.
A último momento Bertoia salió del pabellón y se le informó de la autorización de la visita. Inmediatamente la situación de crisis se aplacó. Sin embargo, cuando los detenidos supieron de la presencia del ministro en el penal comenzaron a multiplicar sus pedidos para comunicarle sus reclamos.
Levantaron la huelga
Durante los últimos días dos internos estuvieron en huelga de hambre y uno de ellos tomó la extrema determinación de coserse la boca a modo de protesta, por lo que considera una "detención injusta". Por ambos casos tomó intervención el Observatorio de Derechos Humanos.
Según confirmó el ministro Larreguy al cierre de esta edición, tras un diálogo y varios compromisos ambos detenidos levantaron la huelga. Saúl Velasco, quien se había cosido los labios, permitió que lo atendiera un médico y comenzó a comer. Para el lunes se le prometió un encuentro con los funcionarios del Patronato de Asistencia de Presos y Liberados. Por su parte Alejandro Forno, el otro interno que llevaba casi diez días de ayuno y que se negaba a recibir asistencia médica, cedió ante la promesa de gestionar sus reclamos por vía del Patronato. Telefónicamente desde el ministerio de Salud ordenaron adaptar una cama en el Pabellón Nº 12 para que pueda recibir hidratación y medicación por suero.