ALLEN (AA).- Nuevamente los niños volvieron a ser protagonistas y víctimas de hechos trágicos en la zona de los hornos ladrilleros de Allen. Esta vez, dos hermanitos sufrieron quemaduras de distinta consideración cuando se incendió la pieza en la que dormían. El siniestro se habría producido a causa de un circuito que se generó en la instalación eléctrica. Un bebé de tan sólo tres meses debió ser trasladado de urgencia a Buenos Aires y su estado es crítico.
El incendio ocurrió el miércoles cerca de las 14 en un horno de ladrillos que está ubicado en la barda norte de Allen, a unos tres kilómetros del centro de la ciudad. En ese momento los hermanitos Dilan Martínez de tres meses y Heber Sánchez de dos años, descansaban dentro de una precaria pieza cuando el cableado de la improvisada instalación eléctrica entró en cortocircuito y una chispa encendió el colchón en donde dormían.
Luego de oír el llanto desesperado de los niños, los familiares y obreros que trabajan en el horno de ladrillos llegaron hasta la pieza y con baldes de agua sofocaron el fuego. Inmediatamente el tío de los chiquitos llamó al dueño del campamento ladrillero y a bordo de un vehículo particular trasladaron a los hermanitos hasta el hospital local, "Dr. Ernesto Accame".
"Ya habíamos almorzado. Estábamos trabajando y cuando nos dimos cuenta los chicos ya estaban incendiándose. Lo que nos pasó fue una desgracia. El fuego no fue mucho pero lastimó demasiado a mi sobrino de tres meses", relató a "Río Negro" Gerardo Quispe, tío de los dos nenes.
En el hospital de Allen los niños fueron examinados por los profesionales médicos y por la gravedad de las quemaduras que presentaba el bebé de tres meses, se decidió derivarlo rápidamente hacia el sanatorio Juan XXIII de Roca. La criatura tenía más del 50 por ciento del cuerpo quemado con heridas gravísimas en la zona del rostro y los brazos.
Por ese motivo el bebé fue trasladado en un vuelo sanitario de emergencia hacia el hospital Garrahan de Buenos Aires, en donde hasta ayer permanecía junto a su madre. En tanto el otro menor, Heber Sánchez que se encontraba internado en el nosocomio local, evolucionó favorablemente y ya recibió el alta médica.
Lamentablemente en los hornos de ladrillos los obreros y sus hijos viven en pésimas condiciones, y los menores pasan largas horas solos mientras sus padres trabajan. En la Colonia 12 de Octubre y durante los últimos dos años se han registrado numerosos accidentes trágicos. Por caso un chiquito perdió la vida al ser aplastado por un tractor, otro falleció al caer a una acequia y una beba fue resucitada en la guardia del hospital tras electrocutarse.
