SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El intendente Marcelo Cascón presentó al Concejo Municipal tres proyectos de ordenanza que apuntan a dotar de mayor equidad a la tasa de servicios y mejorar los niveles de cobro, así como a ejercer un control más efectivo sobre los contribuyentes morosos.

El paquete incluye una reforma integral del régimen tributario de la tasa de servicios y de Desarrollo Urbano, que en adelante no serán calculadas en función de las zonas y de los metros construidos, sino que el gravamen tendrá directa relación con los valores fiscales.

Otras iniciativas son la creación de una agencia de recaudación de funcionamiento autárquico y la decisión de tercerizar el relevamiento de información y actualización de catastro.

Este último proyecto está emparentado con otro que propone delegar en abogados externos la ejecución de deudas tributarias, y que el Deliberante ya tiene en tratamiento desde hace meses.

El bloque de iniciativas impulsadas por Cascón y por su secretario de Economía, Federico Lutz, representan la apuesta más fuerte en materia económica desde el inicio de la gestión.

Las medidas buscan incrementar en forma rápida el flujo de ingresos del municipio, que para el 2010 tiene presupuestado un déficit de 16 millones de pesos.

Los ediles seguramente dedicarán un análisis detenido y meduloso a los proyectos, aunque en el caso de las tasas el Ejecutivo pretende que la modificación entre en vigencia "con la liquidación de la primera cuota bimestral del período 2010".

El proyecto precisa que el costo anual de la prestación de servicios es de 23,7 millones de pesos y establece un esquema "progresivo", según el cual el 30% de esa suma será soportado por todos los contribuyentes y el resto recaerá en forma proporcional sobre las propiedades valuadas en más de 16.500 pesos.

En los fundamentos, la iniciativa elaborada por Lutz se adelanta a posibles críticas por la poca concordancia entre los importes de la tasa y el costo estricto de los servicios en cada caso.

Cita fallos y tratados según los cuales "es imposible fijar con exactitud el costo individual" de un servicio y la relación costo/importe "no puede ser una igualdad matemática o equivalencia estricta, sino que debe haber una razonable y discreta proporcionalidad entre los términos".

Advierte que de acuerdo a la jurisprudencia, la tasa "puede ser graduada conforme a la capacidad contributiva del obligado".

Esos argumentos están dirigidos a replicar a la Asamblea de Vecinos por las Tasas Justas, que han atacado con dureza el gravamen hoy vigente y reclamaron que sea en cada caso un fiel reflejo de los costos.

La agencia de recaudación imaginada por Cascón está inspirada en la que conformó en Buenos Aires Santiago Montoya. Tendrá autarquía administrativa y financiera y se ocupará de fijar la política tributaria y gestionar "los sistemas fiscales" del municipio.

Sus recursos se compondrán en el primer año con el 7% de la recaudación neta total de los tributos que administre la agencia. De allí en más esa suma se reducirá anualmente un 0,4% en cinco ejercicios fiscales posteriores.

Un dato inusual es que la agencia contará con un "fondo de incentivo y productividad" conformado con el 0,6% de la recaudación fiscal del municipio, que será distribuido entre los miembros del organismo.