Las familias Morales y Fernández, mantienen cortados los accesos a los pozos que opera Petrobrás en sus campos en jurisdicción de 25 de Mayo desde hace exactamente un mes y dos días. El reclamo original servidumbres y saneamiento- se mantiene, pero no hubo respuesta alguna y entienden ahora que el gobierno no quiere oírlos, ni permitir que cobren, para no perder una importante cifra que percibe por servidumbres a través del Ente Provincial del Río Colorado.
Cuando recién iniciaron la medida de fuerza, el 2 de noviembre, comentaron que la empresa les exigió presentar determinada documentación para efectivizarles el pago, pero cumplimentaron con ello sin que la petrolera de señales de pagar. Poco más tarde se enteraron extraoficialmente que Petrobras estaría dispuesta a pagarles, pero que quien no lo permite es el gobierno provincial, habida cuenta que del lado rionegrino, al petrolera brasileña le paga a los superficiarios que aún no tienen el título.
Si bien hay un puesto policial intentando asegurar que pasen los vehículos y personal, los campesinos optaron por despalzarse a un kilómetro de ese lugar y cortar el camino. La policía fue hasta allí, liberó el camino sacando un montículo de tierra que habían puesto, pero días más tarde volvieron a cortar sólo con una cinta y así permanecen. Sólo permiten el paso de dos bateristas para evitar derrames y de personal de seguridad.
Hubo momentos en que hubo riesgo de derrame y fue la propia familia la que recomendó parar preventivamente los pozos. Esto sucedió en la primer semana de corte y generó cierta tensión porque dejaron de producir entonces más de cien pozos en ese campo en el que operan más de 500 perforaciones.
Agencia Catriel