Angustiado por los malos resultados, Leonardo Madelón renunció a la dirección técnica de Gimnasia La Plata pues dijo haberse quedado "sin energía" para seguir en el cargo, una frase que Marcelo Bielsa supo utilizar en su momento para explicar su adiós del seleccionado argentino.
"Perdí la fuerza y por eso me voy. No hay nada misterioso, no hay otra oferta de trabajo. No es un fracaso, no es abandonar el barco. Me quedé sin energía. Simplemente quiero descansar, tuve muchos dramas en el año que no los pude llorar. Tengo derecho de estar cansado", dijo Madelón en conferencia de prensa tras despedirse del plantel en Estancia Chica.
El domingo, ante Lanús, el equipo será dirigido por Pablo Morant, coordinador de las divisiones inferiores del club, ya que los dirigentes se van a tomar unos días para elegir al sucesor de Madelón, quien envió un mensaje: "Gimnasia necesita otra gente, otra persona, otro mensaje. Quizás llegue alguien que trabaje menos y tenga más éxito. Dios quiera que elijan bien, me parece que hay tiempo".
El vicepresidente de Gimnasia, Fabián Gagliardi, estimó que para hoy "vamos a tener nuevo técnico o al menos estar rumbeados". Por un lado el presidente Walter Gisande querría tener a un hombre de las vísceras del club. En ese sentido el primer nombre que surgió fue el de Pablo "Moncho" Fernández como una posibilidad.
"El objetivo principal se logró, que era darle vida al club. En la temporada pasada hicimos una gran campaña, más para entrar a las copas que para pelear el descenso. Este año hemos jugado muchos partidos bien y no hemos tenido fortuna. Estamos en deuda con la gente porque sacamos pocos puntos", evaluó Madelón.
"Cuando volvimos al vestuario con el cuerpo técnico después del partido con Argentinos, los cinco nos dimos cuenta de que lo mejor era dejarle el lugar a otra gente", concluyó.
