SIERRA GRANDE (ASG) - El tramo de asfalto de 8 kilómetros de la ruta provincial 5, que va al balneario Playas Doradas, aún no está terminada pero todos la usan.

Falta señalización y se constituye en un peligro latente.

Ya por uso y costumbre todos transitan, desde hace meses, el tramo de ruta de asfalto que hay entre Sierra Grande y Playas Doradas.

La ruta de tierra que va a la villa balnearia es de 28 kilómetros y desde hace 3 años Viarse realiza un nuevo trazado y en ese plan también construyó 8 kilómetros de asfalto.

Ese trayecto nace en Sierra Grande, a la altura de la tradicional parrilla Córdoba, De esta manera se generó un nuevo acceso a la ruta a esta altura y quedó atrás el viejo ingreso por al estación de servicios Petrobras.

El problema es que la ruta no está demarcada con pintura y tampoco cuenta con señalización a los costados. Su utilización es por costumbre, porque un día los

usuarios se dieron cuenta que nada impedía subir al asfalto.

Hasta aquí no han ocurrido accidentes que lamentar, pero con la llegada de la temporada se aceleran los riesgos.

El Presidente de la cooperativa Coopesal Jorge Perera, se mostró preocupado. "Hemos hablado con Viarse para que solucione el problema de la pintura de la ruta, el tramo se usa y no hay información oficial si se puede usar o no, incluso los organismos oficiales la utilizan a diario", dijo.

El secretario de Obras Públicas del municipio, Carlos Abot, señaló que fue imposible controlar el acceso al asfalto porque todos los obstáculos que ponían eran retirados por los usuarios de la ruta.

Abot señaló que el jefe del Distrito de San Antonio de Viarse le informó que esta semana llegará la pintura para el trabajo.

Estiman que desde el jueves podrán iniciar los trabajos.

Desde el comienzo esta ruta fue motivo de planteos e interrogantes. Nunca se supo, por ejemplo, el plazo de ejecución. El estado rionegrino ha ocupado al menos tres años en hacer solo un tramo de lo que iba a ser una nueva traza a hasta Playas Doradas, de 28 kilómetros y así resolver un enorme problema de acceso que hay y que constituye la mayor queja de residentes y visitantes.

Atento a la imposibilidad financiera del avance de la obra por parte de la provincia, el Intendente Nelson Iribarren ya solicitó la transferencia del proyecto de asfalto para obtener financiamiento del estado nacional.