VIEDMA (AV)- Río Negro asigna de 13 a 15 millones de pesos anuales en la adquisición de medicamentos oncológicos. La provincia avanza finalmente en la fijación de criterios terapéuticos para financiar ese tipo de tratamientos.
Salud acusó la existencia de un vademécum oncológico y un protocolo, aunque su vigencia es relativa. Hay diferencias y cuestionamientos entre los organismos sanitarios y los prestadores. Por caso, la junta de Administración del Ipross evalúa un pedido de sanción para un oncólogo por incumplimiento de las normas médicas, pero la junta todavía no resolvió. La solicitud técnica pretende incluso la suspensión de la matrícula.
El expediente del Ipross reeditó el análisis de la normativa provincial y Salud concluyó así con la conformación de la comisión prevista en la ley 3758, que reguló "el empleo de las prácticas oncoquimioterápicos".
Su conformación llega algo demorada porque se cumplió la semana pasada, es decir, seis años después de entrada en vigencia de la normativa, que se promulgó en setiembre del 2003. Esa comisión funcionará en el ámbito de Salud y la preside la ministra Cristina Uría.
La integración se completará con los legisladores Marta Milesi (radical), Inés Lazzarini (PPR) y Luis Bonardo (Foro), el secretario Técnico del Ipross, Sergio Wisky, el secretario de Salud, Daniel Chiosso, el jefe del Programa Provincial de Control de Cáncer, Miguel Ledesma y el titular del área Farmacia del ministerio, Carlos Felicito.
Cuestionan un tratamiento
Wisky integra está comisión y firmó recientemente un dictamen donde cuestiona la prescripción y tratamiento oncológico de Rubén Kowalyszyn. El caso fue enviado a la junta -que preside Alcides Pinazo- para su análisis. A principios del 2008, Pinazo había anunciado que la obra social fijará parámetros y con ello límites en la provisión oncológica. No fue así. El Ipross desembolsa actualmente más de 12 millones anuales (contra los casi 8 millones del 2007) y Salud entrega por otros tres millones, según las últimas estimaciones.
Al conformar la Comisión, la ministra expresó que ella deberá "analizar y proponer los lineamientos para la programación, normatización y fiscalización del empleo de los medicamentos oncoquimioterá- picos que se utilizan para el tratamiento del cáncer. En un intento de justificación, la funcionaria manifestó que esas "funciones que debía realizar esa comisión fue desarrollada por Salud a lo largo de los últimos años, asumiendo el compromiso de cumplir las obligaciones que le son propias".
Recordó que Río Negro dispone del Registro de Tumores y Seguimiento de pacientes y que en el 2007 se definió el protocolo de tratamientos oncológicos y el vademécum oncológico provincial, cuya elaboración estuvo a cargo de especialistas del sector público. Ambos documentos están contenidos en las "Guías Terapéuticas de Tratamientos de Eficacia Aprobada en Oncología Clínica, Oncohematología y Oncopediatría".
En otra parte, Uría destacó que la comisión tiene la atribución de "realizar un protocolo de tratamientos oncológicos y definir un vademécum para satisfacer las necesidades terapéuticas en la cobertura total de las patologías, con el menor costo y el mejor tratamiento".
También ese cuerpo -según la normativa- deberá "promover reuniones de oncólogos del sector salud público y privado para la implementación de protocolos y normatización de tratamientos, y proponer las actividades que correspondan para asegurar la distribución y contralor de este tipo de drogas".
El viernes, funcionarios de Salud ya se reunieron con oncólogos y se acordaron nuevos criterios de revisión del "actual protocolo de tratamientos", considerando "la dinámica que adquiere en medicina este tipo de documentos por la constante innovación tecnológica".