BUENOS AIRES.- La presidenta Cristina Fernández, que hoy se reunirá con el papa Benedicto XVI para conmemorar, junto con su colega chilena, Michelle Bachelet, el vigésimo quinto aniversario de la firma del Tratado de Paz entre los dos países, mantuvo ayer en Roma varias entrevistas con eclesiásticos.
La primera mandataria resaltó la importancia de sus encuentros de hoy con Su Santidad -una audiencia privada y la reunión formal con Bachelet- y descartó nuevos encontronazos con el Episcopado argentino.
Lo hizo al restar trascendencia a una frase del documento de la Iglesia difundido los primeros días de noviembre para recordar los 25 años de la firma del Tratado donde dice que el espíritu mediador por la paz de aquellos años debería inspirar "las políticas que han de adoptar las autoridades a fin de cohesionar y pacificar al pueblo argentino".
"No me paree que deba ser una exégeta de las palabras del Episcopado", dijo Fernández de Kirchner, "fue un documento que tuvo que ver con recordar lo que fue la diplomacia vaticana yo leo los documentos tal cual han sido expresados y creo puntualmente que (los obispos) se refirieron a lo que vamos a conmemorar mañana (por hoy)".
Destacó que "una comitiva ampliamente institucional y representativa de todos los sectores de la República Argentina como la que nos acompaña es un poco la confirmación de que nosotros también pensamos en ese sentido".
En este sentido, recordó que en su momento "había quedado claro", dijo, que aquella manifestación de Benedicto XVI había sido pronunciada tiempo atrás y que "son las frases que siempre dice Su Santidad respecto a la pobreza en la Argentina, en Rusia, en Estados Unidos o en cualquier parte del mundo donde se hace la colecta" de Cáritas.
"Intentar ubicarlo y contextualizarlo con referencia al gobierno, me parece una inexactitud cronológica e institucional", señaló para agregar que "tratar de involucrar a figuras de la importancia de Su Santidad y utilizarlas políticamente no me parece adecuado por parte de nadie". (DyN)