JERUSALÉN/RAMALLAH.- El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, anunció un congelamiento de la construcción de asentamientos en Cisjordania durante diez meses, instando a los palestinos a aceptar la propuesta y reanudar las negociaciones de paz, estancadas desde hace tiempo.
Sin embargo, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas, quien se encuentra de visita en Santiago de Chile, rechazó rápidamente la oferta. Su portavoz dijo que los palestinos insisten en un congelamiento total de las construcciones, incluyendo Jerusalén Oriental.
En rueda de prensa en Jerusalén, Netanyahu explicó que la moratoria significa que Israel no construirá nuevos asentamientos ni expropiará más tierras para la expansión de los existentes. Tampoco permitirá el comienzo de construcciones nuevas dentro de los asentamientos existentes por un período de diez meses, excluyendo "edificios públicos que son esenciales para la continuación de una vida normal".
Además de ser temporal, la medida no afecta a las 3.000 viviendas que ya cuentan con el visto bueno del Ministerio de Defensa israelí para empezar a ser construidas en Cisjordania, ni a la continuidad de las construcciones en Jerusalén Este, zona árabe ocupada desde 1967, donde se siguen levantando viviendas judías.
"En relación con Jerusalén, nuestra capital soberana, mi posición es conocida. No fijaré ningún límite para las construcciones en nuestra capital", afirmó Netanyahu.
Al mismo tiempo indicó que pasados los diez meses de moratoria regresará a la política de construcción de los gobiernos que lo antecedieron. Esto es considerado por la ONU como una violación del derecho internacional, porque en las regiones ocupadas no se pueden establecer ciudadanos del país ocupante. Israel sostiene que ni Cisjordania ni Jerusalén Este son territorio ocupado.
Previamente, el gabinete de seguridad israelí votó 11-1 a favor de la medida. Entre los que votaron a favor se encuentra el ministro de Relaciones Exteriores, Avigdor Lieberman, ultraderechista del partido Israel Beiteinu, el principal partido de coalición de Netanyahu.
El propio Lieberman vive en un asentamiento cerca de Jerusalén, pero dijo que no quiere darle a los palestinos un "pretexto" para evitar las negociaciones de paz. Sin embargo, Nabil Abu Rudeineh, el portavoz de Abbas, dijo en una declaración emitida en Santiago de Chile que fue publicada por la agencia de noticias oficial Wafa, que "la reanudación de las negociaciones se deberían basar en una suspensión total de las construcciones en Cisjordania, incluyendo Jerusalén". (DPA/AP)