Vélez volvió a ser el que era en sus mejores tiempos de la temporada y goleó 4-2 a Racing, en el "Amalfitani", de Liniers. El partido cerró la 15º fecha del torneo Apertura, que sigue liderando Banfield, con 35 puntos. Los tres puntos sumados anoche acomodaron a Vélez en el quinto puesto, con 27 puntos. Racing, en cambio, sigue bajando, en la tabla y en los promedios. Tanto, que en la próxima fecha podría caer a puestos de descenso directo.
El partido fue casi siempre de Vélez, que aprovechó bien la endeble defensa de tres que propuso Racing. Sobre todo por la izquierda, que custodiaban Matías Cahais y Adrián Lucero. Por allí, Maxi Moralez hizo lo que quiso.
La ventaja inicial a favor de Racing fue hija del infortunio: un golazo en contra de Gastón Díaz, que cabeceó hacia su propio arco un centro de cabeza de Lucero.
Por eso no le costó nada al local dar vuelta el resultado. Cinco minutos después, Caruso aprovechó un desorden en el área de Racing y seis más tarde, Hernán Rodrigo López aprovechó facilidades por izquierda y envió un centro que cabeceó Nicolás Cabrera al gol.
Apenas iniciado el segundo tiempo, a los seis minutos, los reflejos de De Olivera impidieron que Vélez convirtiera el tercer gol: López empujó con su muslo un centro de Papa, pero el "1" de la Academia, que estaba en la línea del arco, le puso el cuerpo a la pelota.
Cuatro minutos más tarde, la línea de tres defensores volvió a mostrarse frágil, Maxi Moralez desbordó fácilmente a Wagner por izquierda, envió el centro y López, solo en el área de Racing, cabeceó al gol tras una fallida salida de De Olivera.
A los 25, tuvo el descuento Grazzini, tras una remontada de Lugüercio en posición de "8", pero el remate del ex Newell´s, desde afuera del área, fue demasiado débil y fácil para Montoya.
El cuarto de Vélez fue un golazo: López habilitó a Cabral, ingresado por Caruso en el complemento, el juvenil entró solo por el centro y se anticipó a la salida de De Olivera.
El descuento de Grazzini, a diez del final, reavivó a Racing, que se animó a buscar más, pero fue sólo un reflejo de un equipo que nunca encontró la forma de disputarle seriamente el partido a Vélez, incluso en los primeros minutos del partido, cuando lo fue ganando. Los de Liniers ganaron tras dos derrotas seguidas, pero la cima le queda muy lejos.
