CIUDAD JUÁREZ, México, (AFP).- Trece hombres fueron ejecutados en el estado mexicano de Chihuahua (norte), cuatro de ellos en un taller mecánico de la fronteriza Ciudad Juárez, la localidad más violenta del país.
"Cuatro hombres que se encontraban dentro de un taller mecánico fueron ejecutados por hombres armados" en Ciudad Juárez, reportó ayer a los medios la Subprocuraduría de Justicia del estado de Chihuahua.
En Ciudad Juárez fueron asesinados otros seis hombres, incluido un joven de 25 años "que circulaba en una bicicleta y que fue perseguido por varias cuadras por gente armada dentro de una camioneta que, al alcanzarlo, le dispararon en seis ocasiones", explicó la Subprocuraduría.
Tres hombres más murieron en otros puntos de Chihuahua. Este estado, y especialmente Ciudad Juárez con más de 2.000 ejecuciones en lo que va de 2009, padece desde hace más de un año un violento enfrentamiento entre los cárteles de Juárez y de Sinaloa por el control de las rutas de la droga hacia Estados Unidos y por el mercado local.
El Ejército mexicano, que tiene desplegados a 8.500 soldados en Ciudad Juárez, informó el sábado de la detención de dos presuntos sicarios del Cártel de Juárez, de 29 y 19 años, a los que acusa del asesinato de cuatro policías y de haber participado en una masacre en un bar de Ciudad Juárez en la que murió un sargento de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos a principios de mes. Los arrestados "confesaron haber participado, con 12 hombres más, en la ejecución de seis personas en el centro nocturno Amadeus, entre ellas un soldado norteamericano", afirmó Enrique Torres, vocero del Operativo militar Conjunto Chihuahua.
El gobierno mexicano tiene desplegados a casi 50.000 militares en distintos puntos del país para enfrentar a los cárteles de la droga, a los que atribuye más de 14.000 homicidios en los últimos tres años.
Al mismo tiempo, Jesús Zambada Reyes, un hijo del capo narcotraficante mexicano Jesús Zambada García, fue encontrado muerto el jueves último en una vivienda resguardada por la fiscalía mexicana, para la que colaboraba como testigo protegido, informó ayer este organismo.
"Jesús Zambada Reyes murió el jueves en una casa de seguridad de la Procuraduría General de la República (PGR), de la que era testigo protegido. No se puede confirmar nada más, en las próximas horas se dará más información", dijo un portavoz de la fiscalía que pidió el anonimato. Todo apunta a que se trata de un suicidio, dijeron otras fuentes de la fiscalía a medios mexicanos.
Jesús Zambada Reyes, un hijo del capo narcotraficante mexicano Jesús Zambada García, fue encontrado muerto en una vivienda resguardada por la fiscalía mexicana, para la que colaboraba como testigo protegido