El empresario farmacéutico Pedro Vommaro fue detenido ayer en la capital salteña en el marco de la causa que investiga el juez federal Norberto Oyarbide por la denominada "mafia de los medicamentos".
Fuentes policiales informaron que el hombre, de 60 años, fue capturado en un allanamiento realizado en su vivienda por efectivos de la delegación Salta de la fuerza federal, y era trasladado anoche a la Alcaidía de la Superintendencia de Investigaciones para que mañana sea indagado por Oyarbide.
Según se indicó, Vommaro está acusado de "comercialización ilegal de medicamentos" y este arresto se suma a las diez detenciones registradas en las últimas semanas en la ciudad de Buenos Aires y en cuatro provincias.
Cuatro de los sospechosos pertenecen a droguería Del Plata, "una de las más importantes del mercado en la distribución de medicamentos para patologías graves" como cáncer.
Vommaro comercializaba remedios, entre ellos Kaletra, para enfermos infectados con el virus HIV del sida, aparentemente con troqueles falsos y de procedencia ilegal, añadieron los voceros, que dijeron que hace un mes había sido allanado el laboratorio en busca de pruebas.
Personal de Investigación Técnica del Delito trasladará el lunes al acusado al juzgado federal de Oyarbide para que declare en la causa donde están imputados, entre otros, el titular de la obra social y el sindicato de los bancarios, Juan José Zanola; su mujer, Paula Aballay, y el dueño de la droguería San Javier, Néstor Lorenzo, proveedor de obras sociales. Además de la obra social de los bancarios en el expediente se investigan a otras 50 organizaciones, como la de los camioneros, la de los mecánicos (SMATA) y la de los docentes (OSPLAD).
Decenas de allanamienos
En el último mes, hubo medio centenar de allanamientos en la ciudad de Buenos Aires y cuatro provincias, con un resultado de diez detenciones, entre ellos seis empresarios de droguerías.
Oyarbide investiga la venta y suministro de remedios apócrifos o vencidos a afiliados de distintas obras sociales.
Zanola y Aballay recusaron al juez para que se aparte de la causa por considerar que cometió prejuzgamiento al hacer declaraciones a la prensa sobre el avance de la investigación, lo que fue rechazado por la Cámara Federal pero apelado a la Cámara Nacional de Casación Penal, que deberá resolver.
El mes pasado, un aliado de la ex ministra de Salud Graciela Ocaña había denunciado una serie de amenazas anónimas. Se trata de el senador bonaerense Santiago Nardelli, denunciante en la causa. También Ocaña había sido amenazada semanas antes de este hecho, cuando un auto le interrumpió el paso de forma repentina, ante lo cual la ex ministra dio vuelta atrás y regresó por donde había venido.