NEUQUÉN (AN).- La fiscalía pidió ayer 2 años de prisión para un interno de la cárcel federal acusado de matar a otro con un trozo de hierro. En cambio la defensa argumentó que la autoría no está probada y reclamó la absolución.
El imputado, Alejandro Berdugo (34) se declaró inocente y dijo que esta causa es el único obstáculo que le impide obtener la libertad condicional después de pasar 15 años preso.
"Estoy encerrado desde los 18 años, tengo tres hijos que sólo conocen a su padre a través de la reja", dijo Berdugo a los jueces de la Cámara Primera. "Antes (cuando cometió los hechos por los cuales lo condenaron a 22 años de prisión) era un pibe, ahora soy grande, tengo 9,4 de conducta (en el sistema de evaluación del servicio penitenciario), no soy conflictivo, estudio, trabajo. Quiero recuperar mi vida, tener una oportunidad", agregó.
El asesinato de Darío "Patita" Zubía ocurrió el 26 de julio de 2006 en el pabellón 7 de la Unidad 9, la cárcel federal ubicada en el centro de esta capital.
Ayer al mediodía fueron los alegatos. A esa hora se produjo la concentración de los obreros de Zanon frente al edificio de la Cámara a la espera de la sentencia en el caso Alveal (ver en esta edición) lo que generó una situación un tanto embarazosa: para poder escucharse por encima del tronar de los bombos, los jueces, el fiscal, el defensor, el imputado y hasta los periodistas se aproximaron extremadamente unos a otros.
El fiscal Rómulo Patti remarcó que el crimen se dio "dentro de una subcultura" y que resulta "lógico" que sea difícil encontrar testigos.
Se valió entonces de la declaración de un hombre que estaba alojado en ese pabellón pero que ya recuperó la libertad. "Fue el único valiente", destacó.
