VIEDMA (AV).- Río Negro rechazó dos ofertas de productos oncológicos porque los remedios enviados no tenían troqueles o el laboratorio está incluido en la investigación del juez federal Jorge Oyarbide por la causa de la mafia de los medicamentos.

En las últimas semanas, Salud salió a comprar directamente productos oncológicos por la falta de esos medicamentos. Su faltante determinó incluso la suspensión de tratamientos contra el cáncer en algunos hospitales, como el de Viedma.

Recién ayer se conoció que el ministerio que conduce Cristina Uría anuló dos licitaciones por presuntas irregularidades de las proveedoras. La primera fue suspendida cuando Salud detectó que los productos entregados por AMG Farma SRL no incluían los troqueles respectivos.

Esa situación fue denunciada en el Anmat (Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica), quien ya habría confirmado irregularidades en la partida enviada a Viedma. El costo de esa adquisición rondaba los 300.000 pesos.

Por otra parte, otra licitación -que se aproximaba al 1,5 millones- tenía como único oferente en gran parte a Farmaline SA, uno de los laboratorios actualmente investigados por el juez Oyarbide por la llamada causa de la mafia de los medicamentos. La posible adjudicación a Farmaline SA se anuló y se notificó al juzgado.

Ese laboratorio fue allanado por la Justicia en sus dependencias de la avenida Forest 731, en Capital Federal. Los representantes judiciales se llevaron documentación para analizar si sus titulares están vinculados con la red que vendía remedios adulterados al Estado nacional.

Según su página Web, Farmaline vende medicamentos para tratamientos oncológicos, contra el sida, antivirales, esclerosis múltiples, hemodiálisis, hepatitis, insulino dependientes, y, entre otros, transplantes.

La droguería fue creada hace 10 años y figura como proveedora en Buenos Aires, Chubut y La Pampa. La droguería -según se conoció recientemente- también integra la lista de proveedoras de la obra social de Neuquén (ISSN).

Río Negro tiene antecedentes preocupantes de proveedores de medicamentos a Salud y la obra social provincial (Ipross). Hay causas penales por faltantes de oncológicos y por la presentación de troqueles truchos en distintos medicamentos, lo cual determinó la exclusión de la droguería bahiense Gavazza del registro de proveedores del Estado rionegrino. Además, esa misma firma ya había sido la proveedora de las partidas del Yectafer adulterado que afectó a una decena de mujeres en la provincia y causó la muerte a Verónica Díaz, hace casi cinco años.

La demora en la entrega de oncológicos viene siendo motivo de quejas desde hace tiempo en distintas localidades rionegrinas, como en Catriel, donde los enfermos ven muy alterados sus tratamientos.