La operación de canje de la deuda podría beneficiar la calificación de deuda soberana de la Argentina pero si el gobierno no corrige el déficit fiscal, las estadísticas del Indec y el acceso a los mercados, los problemas pueden ser más graves.

A esta conclusión arribaron las principales agencias de riesgo del mundo respecto de las perspectivas de la economía argentina de cara al 2010. Tanto Moody´s como Standard & Poor´s y Fitch aludieron que los problemas fiscales son el principal obstáculo para que el perfil crediticio soberano de la Argentina mejore.

Moody´s, durante un seminario anual, concluyó que "son buenas las perspectivas para la Argentina y las proyecciones para 2010 son de un crecimiento cercano al 3%". Sin embargo, Gabriel Torres, analista de Moody´s dijo que lo más preocupante es "de donde vendrán los recursos para que la Argentina haga frente a sus necesidades de financiamiento". Otro punto en el que hizo hincapié Torres fue el referido a la cuestión estadística y dijo que "la falta de credibilidad en las estadísticas del Indec es una cuestión determinante para el futuro de la Argentina". "Si se soluciona este problema y el canje de la deuda resulta exitoso, la calificación de la Argentina podría cambiar, aunque no en lo inmediato", dijo Torres. Por su parte, Fitch en un informe especial sobre la situación del país admitió que "si el canje de la deuda con los hold outs resulta exitoso, podría levantar la calificación de la deuda soberana de la Argentina".